Aceptar las críticas de forma constructiva
¿Se siente blanco de alguna crítica? Respire.
He aquí un caso que casi todos hemos vivido: un superior o un colega entra en nuestra oficina y, con un tono irrespetuoso, nos dice que no hicimos un buen trabajo en el último proyecto. Instintivamente, nos defendemos o incluso respondemos con agresividad. Una discusión lleva a la siguiente y la situación termina descontrolándose.
Reflexionemos unos instantes: en esta situación de vulnerabilidad, ¿cuál es su primera reacción? ¿Se siente blanco de un ataque? ¿Empieza su respuesta con "Sí, pero..."? ¿Echa la culpa a algún colega o toma represalias? ¿Recibe las críticas como algo personal y como una ofensa? ¿Las ignora, las desautoriza o las rechaza?
Aunque nuestra predisposición natural sea reaccionar así ante las críticas, también podemos confrontarlas de una forma más consciente. No hay recetas simples para gestionar situaciones conflictivas complejas, pero estos pasos pueden ayudar a transformarlas en una oportunidad de crecimiento personal.
1. RESPIRE
Pare y reflexione: ¿qué iba a decir o a hacer? Piense en su respuesta instintiva y conténgase. No haga caso del tono de su interlocutor: usted solo es responsable de reaccionar y comportarse dignamente, no del comportamiento inadecuado de la otra persona.
2. VALORE LA CRÍTICA
En lugar de dejarse llevar por su primera reacción, valore el tiempo y el esfuerzo que su interlocutor ha invertido para hacerle llegar sus comentarios. Si la crítica es malintencionada, puede que el simple hecho de dar las gracias desarme a quien la formula. Las réplicas defensivas o los contraataques no harán más que incrementar la tensión. En lugar de ello, demuestre su disposición a escuchar. Y recuerde: valorar el tiempo y el esfuerzo que alguien dedica para formular una crítica no equivale necesariamente a estar de acuerdo con ella.
3. PREGUNTE
Seguidamente, haga preguntas concretas sobre el asunto señalado, empezando por cuándo, dónde y cómo. Con ello, no solo transformará la crítica dirigida a su persona en una crítica específica, sino que demostrará haber escuchado a quien la planteó. Pida más información sobre las críticas centradas en un comportamiento o un proyecto concretos, y no las lanzadas contra su persona.
4. APORTE
Pregunte si puede aportar su punto de vista sobre el tema. Exprese claramente lo que piensa, señale aquello en lo que está de acuerdo y, si procede, discúlpese. Aclare también en qué no está de acuerdo. Exponga su perspectiva con calma y no se salga del tema en cuestión.
5. BUSQUE SOLUCIONES
Pregunte a su interlocutor qué le sugiere para gestionar mejor el asunto la próxima vez y demuestre su voluntad de hallar una solución. En cualquier caso, no se quede estancado, siga mirando al futuro y céntrese en las medidas concretas que puede adoptar.
Procure usar afirmaciones en primera persona y no en segunda persona
Las oraciones en primera persona dan a su interlocutor más información sobre usted, en lugar de culpabilizarlo del problema. Formule sus afirmaciones siguiendo estos tres pasos:
- Constatación: "He observado...", "He visto...", "Cuando haces..., me siento...".
- Emoción: "Me siento (explique sus emociones, por ejemplo: frustrado, herido, abrumado, etc.)...".
- Conexión: "... porque..." (explique por qué el comportamiento en cuestión desencadena esas emociones).
6. BUSQUE SOLUCIONES ACEPTABLES PARA AMBAS PARTES
Procure encontrar un arreglo aceptable para ambas partes y céntrese en la futura relación laboral con su interlocutor y no en los hechos pasados.
Ejemplos
Afirmaciones en primera persona
"Juan, en la última reunión de personal, dijiste que siempre entregaba tarde. Me sentí avergonzado y herido, porque, hasta ese momento, pensaba que estaba haciendo un buen trabajo".
frente a
Afirmaciones en segunda persona
"Juan, en la última reunión de personal, dijiste que siempre entregaba tarde. Eres muy crítico, y nunca habías dicho algo así. Hasta ese momento, pensaba que estaba haciendo un buen trabajo".
