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Narración

Se pesca todos los días y en casi todos los océanos del planeta.

Se sirve en los restaurantes de moda de todo el mundo e, incluso en lata para los almuerzos escolares.

Es uno de los productos básicos más valiosos en el océano: el atún.

Aleta amarilla… ojo grande (patudo)&hellip albacora (atún blanco atún de altura (bonito)…

Anualmente, se capturan 4.5 millones de toneladas de atún, cerca de la mitad en el Pacífico Central y Occidental.

Es una industria que genera 5,000 millones de dólares al año y un gran recurso económico para docenas de pequeñas naciones insulares. Pero, ¿por cuánto tiempo?

«La gente cree que el océano es inagotable, pero los recursos marinos no son ilimitados».

Andrew Hudson trabaja como Experto en Gestión del Océano del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.

«El Pacífico depende tanto de estos recursos pesqueros, que un colapso podría ser devastador y la recuperación podría llevar décadas, si es que llega a recuperarse».

El sector pesquero del Pacífico Occidental y Central cubre 40 millones de kilómetros cuadrados.

Es una zona poblada por pequeños países insulares que, según el derecho internacional, pueden pescar en una franja de 200 millas desde la costa.

Sin embargo, las zonas de pesca ofrecen un botín para los ladrones. Por este motivo, 17 países se aliaron para proteger el atún.

Con sede en las Islas Salomón, un equipo de trabajo multinacional perteneciente al Organismo de Pesca del Foro de las Islas del Pacífico registra y da seguimiento a 2000 barcos comerciales , declara Steve Masika.

«Esta señal es interesante. No tiene licencia, por lo que no debería dejar este rastro.

Definitivamente su trayectoria no es del todo lícita».

Cada barco transmite una señal, similar a las de los aviones, lo que da indicios acerca de si opera legalmente.

A pesar de los esfuerzos, la captura,, legal e ilegal, se ha duplicado con creces en los últimos diez años. Y aunque el atún de altura (bonito) aún abunda,

el aleta azul está sobre-explotado y las reservas de ojo grande y aleta amarilla se están reduciendo .

Por esta razón el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha colaborado con varios pequeños países insulares para crear la Convención sobre la Pesca.

No hay lugar en el mundo en el que se proteja más el sector pesquero que en el Pacífico Occidental y Central.

Es su forma de vida. Define su cultura. Así es como los isleños se ganan la vida y alimentan a sus familias. Y sin la pesca, todo se vendría abajo.

En la aldea costera de Noro en las Islas Salomón las mañanas hacia el trabajo consisten en isleños subiendo a una camioneta con destino a la planta de procesamiento Sol Tuna.

«¿Cuántas toneladas hay hoy? Sesenta».

Hearty Matamaru, de 25 años, es uno de mil setecientos isleños de Salomón que se gana la vida en la planta de procesamiento Sol Tuna.

«... Buena limpieza... mejor que esa. Esto está realmente bien».

Aquí, un centenar de toneladas de atún son deshuesadas, procesadas, enlatadas y envasadas a diario.

«La fábrica de conservas es muy importante para las personas de la región. Para sus vidas, para sus familias y también para las comunidades cercanas. Nos preocupa que las reservas de atún desaparezcan, porque nuestros trabajos dependen del pescado que se encuentra en nuestras aguas».

Por ahora, el Pacifico Central y Occidental sigue siendo la pesca más productiva del planeta, pero el riesgo de reservas de atún cada vez menores es una señal a la que se le tiene que prestar atención.

«Lo sabemos bien, y el mar nos lo está diciendo muy claramente: necesitamos encontrar planteamientos más sostenibles para la utilización del océano».

Los océanos nos están hablando. Su mensaje es que –si realmente prestamos atención- continuarán abasteciendo a las generaciones venideras.

Este informe ha sido producido por Patrick fríe para las Naciones Unidas.

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