En estos tiempos de incertidumbre, numerosas instituciones de educación superior están reestructurando la visión tradicional que tienen de sí mismas con el fin de dotar a sus alumnos de conocimientos y competencias teóricas y prácticas que les resulten útiles para desarrollar sus perspectivas profesionales en el futuro y aumentar sus posibilidades de tener un empleo cuando finalicen sus estudios. El logro de este objetivo es ahora más difícil dadas las circunstancias imperantes en todo el mundo debido a las consecuencias socioeconómicas de la pandemia de la COVID-19. 

Teniendo esto en cuenta y dentro del marco del Objetivo de Desarrollo Sostenible 8: Trabajo decente y crecimiento económico, la Universidad Federal del Lejano Oriente, una institución miembro de la iniciativa Impacto Académico de las Naciones Unidas (UNAI, por sus siglas en inglés), ha puesto en marcha el programa ASAP con el objetivo de promover el empleo de aquellos estudiantes que puedan desempeñar tareas a distancia para empresas ubicadas en el Lejano Oriente ruso. La iniciativa tiene como finalidad aumentar la empleabilidad de los estudiantes y ayudar quienes han perdido su trabajo como consecuencia del cierre de empresas pequeñas y medianas durante la pandemia.

El proyecto ASAP es un servicio puesto en marcha bajo los auspicios del Ministerio de Ciencia y Educación de la Federación Rusa con el objetivo de promover la colaboración entre estudiantes y empresas. Este servicio forma parte del  programa de ayuda al empleo dirigido a los estudiantes, que fomenta la capacitación basada en la práctica y la orientación profesional, ofreciendo a los alumnos oportunidades de empleo en la vida real. El programa ASAP ofrece una recopilación de ofertas de colaboración y sirve de enlace entre los estudiantes y las empresas asociadas. Las empresas se ponen en contacto con la universidad y ésta facilita el diálogo sobre las condiciones y los plazos, supervisa el proceso y ayuda a todas las partes a alcanzar un acuerdo.

El programa ASAP selecciona a los estudiantes, forma un equipo y hace un seguimiento de su desempeño, ayudándoles a ejecutar puntualmente todas las tareas. Por último, los estudiantes entregan la solución requerida y cobran por ello. Este programa operativo ofrece a todas las partes una serie de beneficios. Los estudiantes que participan en el proyecto obtienen la oportunidad de reforzar sus competencias sin necesidad de interrumpir sus estudios. Las ofertas de las empresas les proporcionan no solo una orientación profesional y una experiencia de trabajo real, sino también la oportunidad de adquirir aptitudes interpersonales, tan importantes al comienzo de sus carreras profesionales.

A su vez, las empresas que optan por subcontratar tareas no rutinarias, que inicialmente exigen un esfuerzo considerable, a los miembros del programa ASAP, resuelven varios problemas al mismo tiempo. Al asignar estar tareas a los estudiantes, las empresas pueden analizar su desempeño y ofrecer quienes tengan más calificaciones y talento de entre todos ellos un posible empleo después de graduarse. Además, la universidad enriquece el abanico de asociados con los que trabaja y su conjunto de herramientas de instrumentos de política para la juventud, al tiempo que contribuye a aumentar el nivel de competencia y competitividad de sus estudiantes. La universidad también actúa como cliente, modernizando sus servicios y procesos internos con la ayuda de estudiantes del programa ASAP que trabajan por cuenta propia.

El proyecto ASAP obtuvo luz verde en abril de 2020, pocos meses después del inicio de la pandemia, y a día de hoy el mismo cuenta con cuatro subdivisiones. Una de ellas, ASAP.IT, se dedica principalmente a la programación y al desarrollo de software y va dirigida a estudiantes especializados en informática con talento y ganas de aprender, creando soluciones de tecnología de la información para clientes y servicios para facilitar la rutina diaria de los estudiantes, inclusive mediante nuevas aplicaciones. Otra subdivisión es ASAP.Architects, responsable de la ejecución de proyectos de mejora del campus, la construcción de un dique en el lago Khanka y la creación de patios en zonas residenciales de la ciudad de Vladivostok.

ASAP.Games es un estudio de capacitación sobre desarrollo de juegos, en el que los participantes estudian de manera independiente las últimas tendencias en esta industria y crean sus propios productos. Las aplicaciones desarrolladas en este ámbito por los estudiantes del programa ASAP persiguen objetivos no solo recreativos sino también educativos. Por último, ASAP.Projects es una definición colectiva para varias iniciativas puestas en marcha bajo los auspicios del proyecto ASAP, como un servicio de asistencia telefónica para promover la integración de un software para conferencias virtuales en el programa de estudios de la universidad, un programa de contenedores inteligentes para el reciclaje selectivo de basura y un conjunto de vídeos animados sobre conocimientos básicos de derechos para niños en edad escolar. Y estas, son solo algunas de las iniciativas en el marco del programa.

“Siempre resulta difícil dar el primer paso en la trayectoria profesional, y nuestro proyecto es un punto de partida para ayudar a los estudiantes precisamente a dar este primer paso con confianza en sus propias capacidades y reforzar sus expectativas profesionales”, explica Yulia Mosenzova, administradora del programa ASAP. “El proyecto ha reunido a personas unidas por un único objetivo: crecer profesionalmente y avanzar en su ámbito de especialización. Y lo más importante es que han tenido éxito, y el equipo de gestores del proyecto contribuye a crear esta atmósfera de excelencia”, explica Ruslan Polynskiy, de la subdivisión ASAP.architects.

Desde su puesta en marcha, el programa ASAP ha acogido a más de 350 estudiantes, aproximadamente un 25% de todos los inscritos en el programa de ayuda al empleo; además cuenta con 12 empresas asociadas, y los participantes han completado más de 30 proyectos. Ahora que ha transcurrido más de un año de su existencia, el proyecto se ha convertido en una plataforma multifuncional que ofrece diversas oportunidades de desarrollo profesional. Los administradores del proyecto organizan actividades educativas, ayudan a los estudiantes a desarrollar sus propias iniciativas y a crear nuevas organizaciones centradas en las competencias profesionales, al tiempo que ofrecen oportunidades de adquirir experiencia práctica.