6 de octubre de 2022

La presencia de iluminación artificial cada vez es mayor en los espacios al aire libre. Más del 80 % de la población mundial vive bajo un «cielo alumbrado» y, en Europa y Norteamérica, la cifra se acerca al 99 %. La observación vía satélite ha demostrado que, entre 2012 y 2016, los espacios al aire libre iluminados artificialmente se han incrementado en un 2,2 % anual.

La luz artificial se utiliza para fines que van desde la seguridad hasta el alumbrado de monumentos y otras atracciones, pasando por la publicidad y el ocio. Pero la iluminación puede interferir gravemente en el medio natural y está alterando y afectando negativamente a la fauna salvaje. Cuando la luz artificial modifica los patrones naturales de luz y oscuridad de los ecosistemas, hablamos de contaminación lumínica. La oscuridad natural tiene tanta importancia para la conservación como la limpieza del agua, del aire y del suelo. 

La contaminación lumínica afecta a las aves migratorias

Cada año, la contaminación lumínica causa la muerte de millones de aves. Muchas aves migratorias, como patos, gansos, lavanderas y pájaros cantores de todo tipo, así como aves marinas, especialmente las que migran de noche, se ven especialmente expuestas al incremento de la contaminación lumínica. Las migrantes de larga distancia, como la reinita estriada (Setophaga striata), la buscarla colicorta asiática (Urosphena squameiceps) y el chorlito asiático grande (Charadrius veredus), pueden iniciar y concluir su migración en zonas con niveles relativamente bajos de contaminación lumínica, pero durante su migración pueden sobrevolar áreas de intenso desarrollo urbano donde sufren elevados niveles de luz artificial.

La luz artificial nocturna también puede afectar al calendario migratorio y a otros comportamientos estacionales, al alterar los relojes biológicos. Por ejemplo, las aves pueden confundir la luz artificial nocturna con períodos más largos de luz diurna. Puede ocurrir que las aves que sufren la contaminación lumínica en sus áreas de invernada inicien la migración antes que las especies que no están expuestas a la luz artificial, y la migración a destiempo puede resultar problemática si, durante el tránsito o en el lugar de destino, no están disponibles las condiciones ambientales y recursos necesarios.

Estos comportamientos antinaturales inducidos por la luz pueden hacer que las aves migratorias pierdan sus reservas de energía, lo que las pone en riesgo de agotamiento, depredación y colisión mortal con edificios y otras infraestructuras artificiales.

Creciente atención internacional a la contaminación lumínica

La buena noticia es que ya existen soluciones para abordar la contaminación lumínica. Muchos gobiernos, ciudades, empresas y comunidades de todo el mundo han adoptado medidas para reducir con efectividad este fenómeno y sus efectos.

Vista simulada de la contaminación lumínica, desde el espacio exterior. Arek Socha/Pixabay

 En el Convenio sobre conservación de las especies migratorias de la fauna silvestre (CMS) se está ultimando un conjunto de directrices válidas a escala mundial que ayudarán a los distintos intervinientes a mitigar esta gran fuente de contaminación en beneficio de las especies migratorias.

En 2020, la Conferencia de las Partes en el Convenio ya aprobó unas directrices que incluían seis principios generales de gestión destinados a reducir la contaminación lumínica, así como una guía técnica para reducir el impacto de la luz artificial en las tortugas marinas, las aves acuáticas y las aves de costa migratorias.

Las nuevas directrices sobre contaminación lumínica se ocuparán de todas las especies migratorias e incluirán medidas específicas para aves terrestres y murciélagos. Entre las posibles medidas figuran las siguientes: cobertura de las fuentes de luz artificial para evitar las fugas lumínicas; uso de superficies mates de color oscuro; uso de luces con reducción o filtrado de las longitudes de onda nocivas, y utilización de controles lumínicos flexibles para gestionar los tiempos, la intensidad y el color de la luz, por poner solo unos ejemplos. Las medidas se presentarán en la próxima reunión de la Conferencia de las Partes en el Convenio (CMS COP 14), que se celebrará el próximo año en Uzbekistán.

Día Mundial de las Aves Migratorias: noches oscuras, migraciones seguras

La contaminación lumínica es el tema central del Día Mundial de las Aves Migratorias de este año (8 de octubre de 2022), una campaña de ámbito mundial dirigida a la concienciación sobre las aves migratorias y las grandes amenazas a que se exponen.  Con el lema «Noches oscuras, migraciones seguras», invitamos a las autoridades nacionales y subnacionales, y a otros importantes intervinientes mundiales a que asuman compromisos concretos respecto a la adopción de medidas destinadas a solucionar el problema de la contaminación lumínica. Para obtener más información y saber cómo participar, visite nuestra página web: www.worldmigratorybirdday.org.

 

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