New York

02/04/2022

Mensaje del Secretario General con Motivo del Día Internacional de la Fraternidad Humana

António Guterres, Secretary-General

En el Día Internacional de la Fraternidad Humana, reflexionamos sobre la importancia de conocer y respetar nuestra diversidad de culturas y religiones.

Agradezco a los líderes religiosos de todo el mundo que aúnan fuerzas para fomentar el diálogo y la armonía interconfesional.

La declaración titulada “La fraternidad humana por la paz mundial y la convivencia”, que firmaron conjuntamente Su Santidad el Papa Francisco y Su Eminencia el Gran Imán de Al-Azhar, Jeque Ahmad al-Tayyib, es un modelo para la compasión y la solidaridad humana.

Su espíritu es más necesario que nunca.

Ya sean la pobreza y las desigualdades crecientes o los conflictos, las divisiones y la desconfianza, la familia humana está haciendo frente a multitud de pruebas.

Para superarlas, debemos poner freno a quienes explotan las diferencias, trafican con el odio y siembran el miedo al “otro” cuando el descontento se apodera del corazón de las personas.

En el mundo están aumentando el discurso de odio, la intolerancia, la discriminación y hasta las agresiones físicas simplemente por motivo de la religión o las creencias, la etnia, el género o la orientación sexual.

Estos actos innobles violan los derechos humanos y son una afrenta contra los valores de las Naciones Unidas.

En el día de hoy, comprometámonos a mantenernos firmes frente al fanatismo dondequiera y cuandoquiera que lo encontremos.

Reconozcamos nuestra diversidad como algo que nos enriquece y fortalece a todos.

Tendamos puentes entre confesiones movidos por nuestra humanidad común.

Y solidaricémonos con los demás para crear un mundo más inclusivo, pacífico y justo para todos.