El Centro por la Acción Afirmativa de la Universidad Federal del Oeste de Bahía (UFOB), una institución miembro de la iniciativa Impacto Académico de las Naciones Unidas (UNAI, por sus siglas en inglés) en Brasil, acogió durante la pandemia de COVID-19 una serie de seminarios en línea que abordaron distintas formas de prejuicio, como el racismo, la discriminación contra las personas con discapacidad, el sexismo, la xenofobia y otras formas de exclusión. Esta serie se enmarca dentro del “Proyecto Despertar” (Projeto Despertar), y se relaciona con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 10: Reducción de las desigualdades.
La serie se organizó en colaboración con diferentes grupos de interés, tales como asociaciones de estudiantes que representan distintos conglomerados religiosos, étnicos y raciales, así como estudiantes con distintas orientaciones sexuales y nacionalidades. El proyecto, coordinado por la Prof. Tamila Marques Silveira, del Centro de Ciencias Exactas y Tecnologías de la UFOB, abarca temas como género y normas y derechos sexuales, pluralidad cultural y diversidad lingüística, empleo informal, inclusión, raza y violencia.
El objetivo no era únicamente abrir un debate académico, sino también dar voz a distintas experiencias personales que pudieran guiar y contribuir al diálogo. Estas debates en línea se celebraron una semana cada mes, y reunieron a expertos, especialistas, profesores universitarios, representantes comunitarios y estudiantes. Debido al carácter virtual de dichas actividades, también personas ajenas a la comunidad universitaria o procedentes de distintas partes de Brasil pudieron participar en los debates.
Mediante este proyecto, la UFOB contribuye a concientizar acerca de los prejuicios, la intolerancia y la exclusión. El principal objetivo del Proyecto Despertar es sensibilizar y enseñar a superar la intolerancia y los prejuicios para lograr una sociedad más inclusiva y plural. De acuerdo con los organizadores, más de 1.200 personas atendieron las reuniones en línea, de las cuales 350 fueron participantes regulares.
Alicinia Francisco da Cruz, estudiante de Medicina de São Tomé y Príncipe, señaló que el proyecto ayuda a “mirar más allá, explorar nuevos horizontes, crecer como individuos y como miembros de la sociedad en la que vivimos”. La también estudiante de Medicina, Janilde Melissa dos Santos, de Cabo Verde, afirmó que se trata de “una oportunidad increíble para romper con los paradigmas establecidos”. “Otorga una voz a comunidades a menudo olvidadas y que se dan por supuestas”, opinó Maíres das Neves Nascimentos, estudiante de Ingeniería Biotecnológica y miembro de la comunidad indígena brasileña Atikum.
“El proyecto juega un papel crucial en la promoción de una sociedad más equitativa y con menos desigualdades, sobre todo porque aborda cuestiones que benefician a los individuos menos favorecidos”, señaló Manoel Paulino Rodrigues da Silva, estudiante de Derecho y miembro de la Asociación de Estudiantes Discapacitados. “Pone el foco en la relevancia de la cultura e identidad negra, y lo importante que es evitar que desaparezcan”, añadió Maria Nivalda Pereira de Almeida, estudiante de Ingeniería Mecánica y miembro de la asociación Quilombola, un grupo que representa a descendientes de antiguos esclavos.