Los objetivos de desarrollo del Milenio ¿Vamos por buen camino?

Sobre la base de la experiencia adquirida en cuatro décadas de esfuerzos de las Naciones Unidas, los objetivos de desarrollo del Milenio constituyen un marco universal para el desarrollo: erradicar la pobreza extrema y el hambre (objetivo 1), lograr la enseñanza primaria universal universal (objetivo 2), promover la igualdad entre los sexos y el empoderamiento de la mujer (objetivo 3), reducir la mortalidad de los niños menores de 5 años (objetivo 4), mejorar la salud materna (objetivo 5), combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades (objetivo 6), garantizar la sostenibilidad del medio ambiente (objetivo 7) y fomentar una alianza mundial para el desarrollo (objetivo 8). Aunque sean diferentes, no deben interpretarse como objetivos aislados unos de otros, dado que para avanzar en uno deberán abordarse al mismo tiempo los objetivos restantes. Además, los objetivos de desarrollo del Milenio, que han sido tomados de la Declaración del Milenio, aprobada por todos los Estados Miembros de las Naciones Unidas en el año 2000, no son simples declaraciones de nobles intenciones, sino un conjunto de 18 metas concretas, acompañadas de mecanismos de supervisión minuciosos para efectuar un seguimiento y un examen de los avances realizados hacia su consecución.