El 10 de marzo se inició, en la sede de las Naciones Unidas, la reunión especial de alto nivel del ECOSOC con las Instituciones Bretton Woods, la Organización Mundial del Comercio y la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo. La reunión de dos días se centró en el tema general “Coherencia, coordinación y cooperación sobre la Financiación para el Desarrollo”.

En la sesión de apertura, el Sr. Lazarous Kapambwe, Presidente del Consejo Económico y Social (ECOSOC, Economic and Social Council), instó a la comunidad internacional a “mantener su apoyo financiero para los esfuerzos de desarrollo de los Países Menos Desarrollados (PMD), en particular en los ámbitos de la financiación del desarrollo, la ayuda para el comercio y el alivio de la deuda”.

La mayoría de los PMD no están en camino para lograr la mayoría de las Metas de Desarrollo del Milenio (MDM). Los PMD tienen una vulnerabilidad más grande que limita su capacidad para mover sus recursos internos y absorber los choques externos. Su acceso limitado al capital privado hace que la Ayuda Oficial para el Desarrollo (AOD) sea la fuente fundamental de financiación del desarrollo para alcanzar las MDM y otros objetivos del desarrollo. Es importante tener en cuenta que los PMD están representados por 48 países, que componen el 11 por ciento de la población mundial, pero constituyen sólo el 1% del comercio mundial.

El Sr. Luis Manuel Piantini Munnigh, Presidente de la Junta de Comercio y Desarrollo de las Naciones Unidas (UNCTAD), señaló que “la crisis financiera y económica mundial, la crisis alimentaria, la crisis del combustible, y ahora la reciente ola de rebelión que se ha propagado en algunas partes del norte de África y del Oriente medio, ponen de relieve la realidad ineludible de que somos nosotros quienes debemos hacer el cambio fundamental.

Se necesita cambiar la forma en que las empresas han llevado a cabo los negocios en el pasado para eliminar los defectos. Munnigh continuó diciendo que “la mayor apertura del comercio y la mayor integración en la economía mundial se han asociado con la mayor dependencia de los productos básicos y mayor concentración de las exportaciones”. El Sr. Munnigh además hizo hincapié en la necesidad de un “enfoque de desarrollo “inclusivo” que estaría “mirando más allá del crecimiento económico y se centraría más en la generación de empleo y en el mejoramiento de la calidad de vida en general”.

El Sr. Charles Gore, Director de Investigación y Análisis de las Políticas sobre África y los PMD (UNCTAD), sugirió la implementación de una Nueva Arquitectura de Desarrollo Internacional (NADI”), para los PMD que se centraría en el potencial, en vez de en las necesidades, y que permitiría la promoción de la movilización de los recursos internos, usos innovadores de la ayuda, desarrollo de las capacidades del estado, al tiempo que lucha contra la alta dependencia en la ayuda y la débil propiedad de los países.

También destacó que a pesar de que la transferencia de tecnología es una de las prioridades del desarrollo, en la realidad sólo el 22% de los programas reportados promueven la transferencia de tecnología dirigida específicamente a los PMD.

El Sr. Gore dio una visión hacia el futuro, afirmando que “el terremoto de Haití ilustra la vulnerabilidad extrema de los PMD. La crisis financiera y económica mundial se puede considerar como un suceso catastrófico similar a un terremoto, que no sólo provoca devastación, sino que también ofrece una reconstrucción y un nuevo comienzo”.