New York

09/26/2021

Mensaje del Secretario General con motivo del Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares

António Guterres, Secretary-General

Desde un primer momento, la lucha contra la amenaza existencial de las armas nucleares ha sido fundamental en la labor de las Naciones Unidas.

En la primera resolución aprobada por la Asamblea General en 1946 se reflejaba ya la voluntad de “eliminar las armas atómicas de los armamentos nacionales, así como todas las demás armas capaces de causar destrucción colectiva de importancia”.

Setenta y seis años después, no hemos logrado aún los objetivos de esa resolución.

Al conmemorar este Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares, nos enfrentamos al mayor nivel de riesgo nuclear en casi cuatro décadas.

Hay cerca de 14.000 armas nucleares almacenadas en todo el mundo. Solo hace falta pulsar un botón para que cientos de ellas sean lanzadas. Y aunque el número total de este tipo de armas ha disminuido durante décadas, los Estados están mejorando cualitativamente sus arsenales, y estamos viendo señales preocupantes de una nueva carrera de armamentos.

Estas armas no son un problema del pasado. Hoy día siguen constituyendo una amenaza. A pesar de nuestros progresos, la humanidad sigue estando inaceptablemente cerca de una aniquilación nuclear.

Sin embargo, hay señales de esperanza. Acogemos con satisfacción la decisión de la Federación de Rusia y los Estados Unidos de prorrogar el Nuevo Tratado START y de entablar un diálogo, así como la entrada en vigor en enero del Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares.

La responsabilidad de aprovechar esos avances recae ahora en los Estados Miembros. La Conferencia de las Partes encargada del Examen del Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares ofrece una oportunidad para que todos los países tomen medidas prácticas para prevenir el uso de estas armas, y eliminarlas, de una vez por todas.

Como familia mundial, no podemos seguir permitiendo que la sombra del conflicto nuclear empañe nuestros esfuerzos por impulsar el desarrollo, alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible y acabar con la pandemia de COVID-19.

Es el momento de terminar con esta lacra para siempre, eliminar las armas nucleares de nuestro mundo y dar inicio a una nueva era de diálogo, confianza y paz para todos.