Los elevados precios de los alimentos han creado 75 millones adicionales de personas que sufren hambre en el mundo. La gravedad de esta situación obliga a dirigir de nuevo la atención al hambre mundial. La crisis se ha abatido con fuerza sobre las comunidades de las montañas. El Año Internacional de las Montañas de 2008 ofrece una ocasión para poner de relieve las oportunidades de tratar la cuestión de la inseguridad alimentaria en las regiones montañosas.
Fuente: FAO