GUATEMALA
 

QUINCUAGÉSIMO SEXTO PERIODO DE SESIONES  DE LA ASAMBLEA GENERAL DE LAS NACIONES UNIDAS

INTERVENCION

DE

S. E. EMBAJADOR GABRIEL ORELLANA ROJAS

MINISTRO DE RELACIONES EXTERIORES

CONFERENCIA SOBRE MEDIDAS PARA FACILITAR LA ENTRADA EN
VIGOR DEL TRATADO DE PROHIBICION COMPLETA DE LOS
ENSAYOS NUCLEARES

Nueva York, 12 de noviembre de 2001




 
 
Señor Presidente,

Mi Delegación se complace por su elección para presidir los trabajos de esta Conferencia, motivo por el cual le extiendo nuestra sincera felicitación.

De igual manera, quiero aprovechar esta oportunidad para expresar nuestro aprecio y felicitación por los esfuerzos así como por la hábil conducción que a lo largo de las reuniones previas exhibió la señora Embajadora de México, doña Olga Pellicer. Igualmente agradecemos los esfuerzos del Señor Secretario Kofi Annan, así como de la señora Louise Fréchette, Secretaria General Adjunta.
 

Señor Presidente,

Hemos participado en el Seminario Regional relizado en Lima, Perú, y hemos cooperado con el Sistema Internacional de Verificación para la instalación de una estación sísmica auxiliar en nuestro territorio, cuya negociación se encuentra en su fase final. Hemos asistido y apoyado las misiones de la secretaría que se han desplazado hacia nuestro país. Varios técnicos guatemaltecos han recibido entrenamiento por parte de la Secretaría de la Organización del Tratado.

Deseamos también expresar nuestra satisfacción porque a inicios del próximo mes el Director general de la Organización Internacional de la Energía Atómica, distinguido señor Mohamed El-Baradei, visitará Guatemala. Es la primera visita que el Director General de esta organización realiza a nuestro país. Por este motivo nos sentimos muy honrados y más comprometidos en la lucha en pro del desarme nuclear.

Queremos comunicar a este plenario que, durante esta visita, Guatemala suscribirá el Protocolo Adicional de Salvaguardias; instrumento con el cual contribuiremos a que América Latina se consolide como una zona libre de armas nucleares. Este gesto no deja dudas sobre nuestra posición en materia de desarme. Ya hicimos la solicitud correspondiente a la Junta de Gobernadores de la OIEA. Mediante la firma de este instrumento tendremos acceso a nuevas formas de cooperación internacional y disponer de nuevas tecnologías que nos faciliten un mejor use de la energía nuclear con fines pacíficos, tan necesaria para el desarrollo.

Nuestra agenda de Estado la constituyen los Acuerdos de Paz firmados en 1996. A esta no escapa nuestra política exterior, cuyo espíritu se nutre de una profunda vocación por la paz y por la búsqueda de soluciones enmarcadas dentro del derecho internacional. Por ello consideramos que la comunidad internacional deberá utilizar todos sus recursos así como de su buen juicio para consolidar un régimen de no proliferación y desarme nuclear que nos permita alcanzar la meta de un mundo libre de armas nucleares.
 
Guatemala cree firrmemente que la entrada en vigor del Tratado para la Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares será un paso gigantesco en la historia del desarme nuclear y de la no proliferación de las armas nucleares, y para lo cual realizará todos sus esfuerzos para conseguirlo.

Hemos iniciado un nuevo milenio sin haber alcanzado nuestros objetivos principales, pese a los grandes esfuerzos hechos hasta ahora que consisten no solamente en frenar la proliferación de las armas nucleases, sino en lograr su destrucción completa. El peligro que representan es algo que nos atañe a todos; estemos o no en condición de producirlas, ya que su capacidad destructiva no conoce límites ni fronteras.
 

Señor Presidente,

Por ello, nuestra Delegación llama a las partes involucradas para que intensifiquen sus esfuerzos y, con decidida voluntad política, pongan fin al estancamiento en que se encuentra el desarme nuclear y hacer una realidad el compromiso, mediante el cual unos países se obligan al desarme y otros renuncian a la posesión de dichas armas.

Asistimos a un período de gran turbulencia internacional. Cuando vemos que existen grupos que, con el apoyo de algunos gobiernos, son capaces de utilizar armamento nuclear y convencional de gran poder, nos percatamos de la fragilidad del sistema de desarme y mantenimiento de la paz. Ello reafirma que nuestro sueño de un mundo fibre de armas nucleases aún se encuentra lejos.

Desde que mi país suscribió el Tratado en septiembre de 1999 ha apoyado totalmente su pronta entrada en vigor y, como to manifestamos durante la conferencia preparatoria celebrada en octubre de ese mismo año en Viena, mantenemos nuestro compromiso de lograr un mundo mejor libre de armas nucleases.

Muchas gracias.