Esta réplica fue hecha en piedra ígnea por el artista Kellypalik Pishuktie de Iqaluit, Territorios del Noroeste (Canadá).  

El inukshuk fue creado como punto de referencia para que los cazadores y viajeros se orientasen y encontrasen el camino en las planicies árticas. Esta región del Círculo Polar Ártico está dominada por el bioma de la tundra, con pocos hitos naturales. El arte ártico forma parte del patrimonio inuit y garantiza la supervivencia.

Estas figuras de piedra, cuya silueta se perfila en el horizonte, se han utilizado históricamente para la navegación, dando la bienvenida y guiando a los viajeros por buenas rutas, señalando zonas de pesca y caza, y para marcar los escondites de comida. Tal vez esta escultura sea un símbolo que ayude a todos los pueblos y naciones a encontrar su camino hacia un futuro pacífico.