Cada año ocho millones de toneladas de plástico van a parar a los océanos. Esto supone un gran riesgo tanto para la flora y fauna marina, como para los seres humanos, que podríamos encontrarnos esos plásticos en nuestro plato. Si no se hace nada para frenar esta tendencia, en 2050 habrá en los océanos más plásticos que peces. La campaña de la ONU #MaresLimpios busca erradicar este problema.