Creación del Departamento de Estrategias, Políticas y Conformidad de la Gestión (DEPCG)

Para apoyar el cambio hacia un paradigma de gestión descentralizada, la Asamblea General aprobó la creación de dos nuevos departamentos: el Departamento de Estrategias, Políticas y Conformidad de la Gestión (DEPCG) y el Departamento de Apoyo Operacional (DAO). Ambos departamentos quedaron establecidos el 1 de enero de 2019. 

En cuestiones de gestión, el DEPCG tiene una clara función de estrategia, políticas y conformidad, mientras que el DAO se centra en las operaciones, los servicios, las transacciones y el apoyo a las entidades en entornos frágiles. 

La reforma de la gestión afecta a todo el personal de la Secretaría. En consonancia con la descentralización de la autoridad, las oficinas ejecutivas, las dependencias administrativas y los componentes de apoyo a las misiones son el primer lugar adonde acude el personal que requiere asesoramiento sobre la interpretación o la aplicación de políticas en materia de recursos humanos, gestión presupuestaria y financiera, gestión de la cadena de suministro o administración general. Los asuntos más complejos, o los ámbitos en que se justifica un enfoque común de los procesos o recursos, se elevarán a la atención del DAO, mientras que el DEPCG vigilará la conformidad con las obligaciones y encarará los desafíos que requieren una respuesta a nivel de formulación de políticas. 

La mayoría de las entidades que antes apoyaban la Oficina Ejecutiva del Secretario General, la Oficina Ejecutiva del Departamento de Gestión o la Oficina Ejecutiva conjunta de los Departamentos de Operaciones de Mantenimiento de la Paz y de Apoyo a las Actividades sobre el Terreno reciben ahora el apoyo de la Sección de Apoyo al Cliente en la Sede de la División de Administración del DAO. 

Al mejorar la rendición de cuentas y aumentar la transparencia, y haciendo del cliente el centro de atención de la Secretaría, el nuevo paradigma de la gestión ayudará a erradicar la mentalidad compartimentada, aprovechar las buenas prácticas y elaborar valores comunes en todo el sistema de las Naciones Unidas.