UNAI y las Becas del Milenio de la Red de Campus del Milenio ayudan a los estudiantes a diseñar e implementar iniciativas comunitarias que promuevan la sostenibilidad y la ayuda a las personas más necesitadas.

Miembro de la promoción de 2018 de las Becas del Milenio, Chloe Quigley, ha empoderado a las mujeres que viven con traumas a través de su organización Oso. Su Proyecto Beca del Milenio promueve el ODS 1: Fin de la Pobreza, el ODS 5: Igualdad de género y el ODS 8: Trabajo decente y crecimiento económico.

Este es el mensaje de Chloe Quigley con respecto a su Proyecto para la Beca del Milenio:

A la edad de 8 años, comencé a prestar servicios a la comunidad en Guatemala. En concreto, he participado en la construcción de varias decenas de patios de recreo y casas, de clínicas médicas y de campos de deportes, trabajando en lo que se conoce como las comunidades de vertederos de basura de la Ciudad de Guatemala. Se trata de comunidades centradas alrededor del único basurero de la ciudad y donde viven y trabajan más de 12.000 personas, recuperando cosas directamente de la basura. Con el corazón roto por las muchas necesidades que mis manos nunca podrán satisfacer, he pasado la última década conociendo estas comunidades y buscando todas las formas posibles de serles de ayuda. Hoy, soy estudiante de segundo año en la Universidad de Georgetown en el área de Estudios de Justicia y Paz con una especialización en español y un Certificado en Iniciativa Empresarial.

También soy la fundadora de Oso, una empresa que emplea a 12 mujeres que afirman haber pasado por un trauma, en las comunidades de basureros de la Ciudad de Guatemala, y que hacen a mano ositos de peluche que se venden en todo el mundo. De esta forma, se empodera a esas mujeres, que ganan el doble de los ingresos medios de su comunidad. Oso se impulsó a través de un Fondo de Innovación Social y Servicios Públicos de Georgetown en la primavera de 2018, se acabó implementando en agosto pasado, y ha sido autosostenible desde octubre. Los ositos de peluche Oso han llegado a hogares de todo el territorio de los Estados Unidos y de países como Canadá, México, India, España, el Reino Unido e incluso en nuestro propio país. Cada uno de ellos está hecho, nombrado y numerado de forma única, y garantizan una sonrisa en la cara de alguien, sin importar su edad.

La misión multidimensional de Oso le permite conectar comunidades que difícilmente entrarían en contacto, aumentar la conciencia global y proporcionar un ingreso digno y sostenible en el seno de una comunidad a un grupo de mujeres que de otra manera tendrían que resignarse a clasificar la basura. El futuro de Oso se basa en el interés y el apoyo continuo de socios globales que creen que cada individuo tiene derecho a trabajar y debe reconocer su potencial. Mientras busco hacer crecer a Oso en el futuro, quiero asegurarme de que siga siendo un programa que permita a las mujeres de la Ciudad de Guatemala no sólo aprender a hacer ositos de peluche, sino también crecer en su comunidad, compartiendo las pruebas y los triunfos de la vida y la feminidad.

Mi papel es el de defensora, empresaria, aprendiz, servidora, estudiante y amiga. De todas las causas y lugares en las que se puede prestar un servicio, he encontrado uno que me importa y al que estoy dispuesta a dedicar mi atención. Ha sido muy difícil y ha habido mucho que aprender en el camino, pero con las intenciones correctas y una planificación cuidadosa, animo a otros estudiantes apasionados a que se decidan a intentarlo.

Si te interesa ser Becario del Milenio en 2019, solicítalo aquí en el programa de las Becas del Milenio. La primera fase de selección de las solicitudes se realiza inmediatamente después de su admisión.