En la fecha de su fundación, el 15 de junio de 1964, las naciones que firmaron la conocida “Declaración Conjunta de los setenta y siete países” constituyeron la organización intergubernamental de países en desarrollo más grande de las Naciones Unidas con el fin de formular y promover sus intereses colectivos y su agenda común para el desarrollo.

Desde la primera Reunión Ministerial del Grupo de los 77, celebrada en Argelia en octubre de 1967, y con la aprobación de la Carta de Argel, el Grupo de los 77 estableció los mecanismos y las estructuras institucionales que han contribuido a configurar la agenda para el desarrollo internacional y a cambiar el panorama del Sur Global durante los últimos cinco decenios.

A lo largo de los años, el Grupo ha adquirido un papel cada vez más importante en la determinación y el desarrollo de las relaciones internacionales a través de negociaciones globales sobre las principales cuestiones de las relaciones Norte-Sur y el desarrollo. El Grupo está presente a nivel mundial en los centros de las Naciones Unidas en Nueva York, Ginebra, Nairobi, París, Roma, Viena y Washington D.C., y participa de forma destacada en las negociaciones en curso sobre diversas cuestiones mundiales, entre ellas, el cambio climático, la erradicación de la pobreza, la migración, el comercio y el derecho del mar.

Hoy en día, el Grupo de los 77 es el único mecanismo viable y operativo en la diplomacia económica multilateral del sistema de las Naciones Unidas. El aumento del número de miembros da fe de su fortaleza sostenida. El Grupo, que pasó de los 77 Estados miembros fundadores de 1964 a 133 en 2014, es la organización intergubernamental más grande del Sur Global encargada de la agenda para el desarrollo.

El Grupo se creó con el objetivo de fomentar de forma colectiva el papel y la influencia de los países en desarrollo a escala mundial cuando se hizo evidente que la independencia política, para ser significativa, exigía cambios en las relaciones económicas entre el Norte y el Sur. De este modo, la independencia política debía ir acompañada de la diplomacia económica con el objetivo último de reformar el orden económico internacional.

En la actualidad, el Grupo de los 77 representa la mayor coalición humanitaria y sigue siendo un instrumento de negociación vital para la diplomacia multilateral económica, así como para garantizar la paz y la justicia internacionales a través de la cooperación internacional para el desarrollo en el marco de las Naciones Unidas. Esta ha sido la idea principal de la expresión conjunta de la solidaridad Sur-Sur desde la creación del Grupo, cuya voz colectiva se ha extendido a todas las instituciones y organizaciones internacionales que representan las esperanzas y aspiraciones de la mayor parte de la humanidad.

El papel decisivo que desempeña el Grupo de los 77 en la diplomacia económica y en la proyección de los intereses por el desarrollo del Sur Global constituye un testimonio de la importancia que sigue teniendo en el diálogo sobre el desarrollo mundial. El Grupo ha conseguido, mediante los limitados recursos de su Secretaría Ejecutiva compacta, trabajar satisfactoriamente con sus asociados para el desarrollo en el análisis de cuestiones y la propuesta de soluciones alternativas para los problemas del desarrollo.

Durante 50 años, el Grupo de los 77 ha contribuido a la formulación y la adopción de numerosos programas, resoluciones y planes de acción de las Naciones Unidas, la mayoría de los cuales abordan las cuestiones esenciales del desarrollo. La importancia de su papel en la creación de un consenso mundial sobre las cuestiones relacionadas con el desarrollo ha sido ampliamente reconocida por líderes mundiales, diplomáticos, parlamentarios, círculos académicos, investigadores, medios de información y la sociedad civil.

Esto constituye un homenaje a la validez histórica de la concepción, los propósitos y esfuerzos del Grupo, que ha superado la prueba del tiempo. Los fundamentos del Grupo eran, y siguen siendo, la lucha por conseguir una participación más amplia de los países en desarrollo en la adopción de decisiones económicas en el plano mundial y por incluir la dimensión de desarrollo en las políticas e instituciones internacionales en el marco del sistema de las Naciones Unidas.

En la actualidad, el Grupo está formado por 133 países y abarca más del 80% de la población mundial y aproximadamente dos tercios de los miembros de las Naciones Unidas. El Grupo es la segunda organización internacional más grande del mundo después de las Naciones Unidas y lo han presidido muchos países, tanto economías emergentes en desarrollo como países menos adelantados y pequeños estados insulares en desarrollo, situados en las regiones de África, Asia y el Pacífico o de América Latina y el Caribe.       

El año 2014 supuso un hito en la vida del Grupo, con la celebración del 50º aniversario de su establecimiento, un período durante el que casi ha duplicado sus miembros y multiplicado sus logros en la cooperación Sur-Sur, mientras sigue funcionando como una coalición de naciones en el fomento del diálogo Norte-Sur para el desarrollo. Cabe destacar que, con unos miembros tan diversos y sin una constitución formal, haya conseguido resistir a las turbulencias políticas y económicas del mundo durante 50 años y siga manteniéndose fiel a su misión original de fomentar la agenda de las Naciones Unidas para el desarrollo.         

El Grupo de los 77 ha dedicado 5 decenios a trabajar para lograr el desarrollo. Respeta el principio de que las naciones, ya sean grandes o pequeñas, merecen participar en pie de igualdad en los asuntos mundiales. Hoy en día, el Grupo permanece unido por una geografía común y una historia compartida de lucha por la liberación, la libertad y la solidaridad Sur-Sur.

En sus 50 años de vida, el Grupo de los 77 ha consolidado el Sur Global como una coalición de naciones que aspira a una alianza mundial para la paz y el desarrollo. Actualmente, al Grupo de los 77 se le reconoce su trabajo en el fomento de la cooperación internacional para el desarrollo hacia un mundo próspero y pacífico. El compromiso y la dedicación del Grupo para configurar desinteresadamente los asuntos mundiales han beneficiado a miles de millones de personas en todo el mundo, por lo que este reconocimiento de sus significativas contribuciones en el 50º aniversario del Grupo es lo más apropiado.