Las mujeres embarazadas y sus bebés pagan a menudo con la vida el resultado de los años de conflicto y la falta de inversión en el sistema de salud de Iraq, reveló un informe de la Misión de Asistencia de la ONU en ese país (UNAMI) publicado hoy.

Para combatir esta mortalidad, el Ministerio de Salud iraquí con apoyo de UNICEF ha puesto en marcha el Plan de Acción para Recién Nacidos, que plantea una estrategia de inversión y mejora de los cuidados materno infantiles.

El Plan fue elaborado por UNICEF, la Organización de la Salud (OMS) y el Fondo de Población de la ONU (UNFPA).

El representante de UNICEF en Iraq, Peter Hawkins, destacó la importancia de una atención médica de calidad antes y después del alumbramiento.

“No sólo salvará vidas sino que también es una inversión para asegurar que los niños iraquíes tendrán un buen inicio de vida y alcanzarán todo su potencial”, apuntó.

Las agencias de la ONU consideran que las altas tasas de mortalidad de los recién nacidos en Iraq se debe a las malas prácticas durante el parto y a los cuidados neonatales ineficientes, sobre todo en las áreas remotas del país.

El nuevo Plan promoverá también la lactancia materna, las incubadoras para bebés prematuros y la prevención y tratamiento de infecciones.

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