El director ejecutivo de ONUSIDA anunció hoy un acuerdo con la farmacéutica Roche ha permitido reducir un 35 por ciento el precio de las tecnologías para el diagnóstico del VIH en niños.

En un comunicado de prensa, Michel Sidibé, describió el acuerdo como un importante paso para acabar con el fracaso desmesurado del mundo para atender las necesidades de tratamiento de los niños que viven con el virus.

El nuevo precio es de 9,40 dólares por prueba. La iniciativa de ONUSIDA, lanzada en julio de 2014, tiene como meta mejorar la capacidad de los laboratorios para garantizar que todas las personas infectadas con el VIH puedan recibir tratamientos efectivos y de alta calidad.

Debido a que la tasa de mortalidad de niños con VIH es más alta entre las seis y ocho semanas, la Organización Mundial de la Salud recomienda que todos los niños expuestos al virus reciban una prueba de diagnóstico en los dos primeros meses de vida.

Sin embargo, actualmente sólo la mitad de ellos las reciben, en parte porque el costo ha limitado el número de plataformas que llevan a cabo las pruebas en los países de ingresos bajos y medios.

Esto ha provocado una importante brecha en el acceso a tratamiento para el VIH. En 2014, sólo 32 por ciento de los niños con el virus recibieron terapias antirretrovirales, en comparación con 41 por ciento para los adultos.

Sin saber si un niño tiene el virus o no es imposible acceder a un tratamiento que pudiera salvarle la vida. Y sin tratamiento, la mitad de los niños que nacen con el VIH se morirán antes de los dos años y la mayoría antes de los cinco.

ONUSIDA estableció una meta conocida como “90-90-90”, que plantea que para 2020, el 90 por ciento de todas las personas infectadas con VIH sepa cuál es su condición, que el 90 por ciento de las personas con un diagnóstico positivo reciba las terapias adecuadas y que el 90 por ciento de todas ellas consiga la supresión viral.

Centro de noticias de la ONU