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CAPÍTULO 9: PROTECCIÓN DE LA ATMÓSFERA
EMISIONES DE GASES DE EFECTO INVERNADERO
Ambiental Capítulo 9 Impulso

1. Indicador

a) Nombre: Emisiones de gases de efecto invernadero.

b) Breve definición: Emisiones nacionales antropogénicas de dióxido de carbono (CO2), metano (CH4), y óxido nitroso (N2O).

c) Unidad de medida: Niveles de las emisiones anuales en gigagramos (Gg) de equivalentes de CO2; las emisiones de metano y óxido nitroso se convierten a equivalentes de CO2 utilizando los potenciales de calentamiento mundial; las variaciones en los porcentajes anuales de las emisiones totales de gases de efecto invernadero a partir de 1990 permitirían deducir las tendencias y el ritmo de cambio de los niveles de las emisiones de cada una de las Partes en la Convención sobre el Cambio Climático.

2. Ubicación dentro del marco

a) Programa 21: Capítulo 9: Protección de la atmósfera.

b) Tipo de indicador: Impulso.

3. Significación (pertinencia para la adopción de políticas)

a) Finalidad: El indicador mide las principales emisiones antropogénicas que contribuyen al calentamiento mundial.

b) Pertinencia para el desarrollo sostenible/no sostenible: Los principales gases de efecto invernadero son el dióxido de carbono (CO2); el metano (CH4), y el óxido nitroso (N2O). Aunque existen emisiones naturales de gases de efecto invernadero, se ha determinado que las emisiones antropogénicas son una causa de los cambios climáticos (segundo informe de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambios Climáticos (IPCC), 1995); esas emisiones son el objeto de un instrumento internacional (la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático). Las emisiones se deben en gran medida al consumo de energía y los sistemas de producción, la estructura industrial, el sistema de transporte y el sector agropecuario y forestal de los países, y a las pautas de consumo de la población. Las emisiones de metano y óxido nitroso se deben fundamentalmente a la producción agropecuaria, la ordenación de los desechos y la gestión de la ganadería de los países.

Los cambios climáticos son el resultado, en parte, del aumento de la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera. A un nivel, puede decirse que el calentamiento mundial debido a las emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero no tiene efectos adversos sobre los ecosistemas si el aumento del incremento mundial equivale a 0,1oC por decenio, con un calentamiento máximo total de 2oC por encima de la situación preindustrial (IPCC, 1992). En ese caso, se sugiere que los ecosistemas pueden ajustarse o adaptarse a los cambios de temperatura dentro de esos límites. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambios Climáticos (IPPC) ha establecido niveles para los gases de efecto invernadero más importantes que deberían dar lugar a la estabilización del total de gases de efecto invernadero a un nivel que no tenga efectos adversos. Esto se conoce como la hipótesis de las políticas aceleradas. Sin embargo, habida cuenta del aumento de la concentración atmosférica de gases de efecto invernadero de 280 ppmv (partes por millón en volumen) en el período preindustrial (es decir antes de 1850) a 356 ppmv en 1994, el aumento de la temperatura puede estarse produciendo más rápida y aleatoriamente que antes. Sobre la base de las conclusiones de tres grupos de trabajo, el IPCC dice que la temperatura de la tierra podría aumentar entre 1 y 3,5oC antes del año 2010; lo que representa un promedio de calentamiento probablemente superior al de los últimos 10.000 años.

c) Relación con otros indicadores: Este indicador está estrechamente vinculado a muchos otros indicadores socioeconómicos y ambientales, por ejemplo, la tasa de crecimiento del PIB por habitante, el consumo anual de energía por habitante, el gasto en protección del medio ambiente, y el gasto en medidas para reducir la contaminación del aire.

d) Objetivos: El objetivo de la Convención sobre el Cambio Climático (artículo 2) es lograr la estabilización de las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera a un nivel que impida interferencias antropógenas peligrosas en el sistema climático.

e) Convenios y acuerdos internacionales: La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático entró en vigor en marzo de 1994 y, a finales de enero de 1996, había sido ratificada por 152 países. En su artículo 4, entre otros compromisos, se hace un llamamiento a las Partes incluidas en el anexo I para que reduzcan antes del año 2000 (individual o colectivamente) sus emisiones antropógenas de dióxido de carbono y de otros gases de efecto invernadero al nivel que tenían en 1990. Por otra parte, algunas Partes incluidas en el anexo I de la Convención han fijado objetivos nacionales que superan los establecidos en ésta. Sobre la base de la primera compilación y síntesis de las comunicaciones que se solicitaron a las Partes (véase el documento A/AC.237/81 y Corr.1) sólo algunos países parecen estar en situación de alcanzar el objetivo de estabilización antes del año 2000. Se trata de Dinamarca, los Países Bajos, el Reino Unido, la República Checa y Suiza.

4. Descripción de la metodología y definiciones en que se basa

Los gases de efecto invernadero contribuyen en grados varios al calentamiento mundial según su concentración, la duración prevista de su presencia en la atmósfera, y su capacidad de absorber calor. El potencial de calentamiento de la tierra de cada gas (distintos del CO2) se utiliza como factor de ponderación para calcular las emisiones nacionales de gases de efecto invernadero en equivalentes de CO2.

Las emisiones de CO2, CH4 y N2O se calculan sobre la base de los datos correspondientes al consumo de combustibles, las emisiones provocadas por escapes de combustible, los procesos industriales, el uso de disolventes, la agricultura, los cambios en el uso de la tierra y la silvicultura y los desechos. Los niveles de las emisiones se calculan utilizando los factores de emisión correspondientes a las emisiones de cada gas en las actividades correspondientes. Se ha logrado un mayor grado de comparabilidad internacional utilizando los factores de emisión implícitos propuestos por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambios Climáticos (IPCC). Cuando se disponía de ellos, se han utilizado los factores de emisión nacionales, lo que ha dado lugar a una mayor precisión en la información sobre las emisiones nacionales de gases de efecto invernadero.

Entre los indicadores relacionados propuestos figuran el de las emisiones anuales de gases de efecto invernadero por habitante, y el de las emisiones anuales de gases de efecto invernadero por unidad de PIB.

5. Evaluación de la disponibilidad de datos de fuentes nacionales e internacionales

Treinta y una de las 38 Partes que figuran en el anexo I de la Convención han presentado comunicaciones nacionales que contienen un inventario detallado de las emisiones nacionales de gases de efecto invernadero. Como parte del proceso de examen que se está desarrollando en el marco de la Convención, se ha procedido a examinar en profundidad esas comunicaciones nacionales, lo que ha permitido recoger información detallada sobre las emisiones de gases de efecto invernadero de las Partes que figuran en el anexo I. Se calcula que esas Partes en su conjunto son responsables de más del 60% del total de las emisiones mundiales anuales de gases de efecto invernadero.

En el marco del proceso de examen de la Convención sobre el Cambio Climático, sólo se conocerán, en un principio, los niveles de las emisiones de las Partes que figuran en el anexo I de la Convención (países de la OCDE y países con economías en transición). A mediados de 1997 las Partes que no figuran en el anexo I empezarán también a remitir información de primera mano sobre sus emisiones anuales de gases de efecto invernadero.

6. Organismos que intervienen en la determinación del indicador

El organismo principal es la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. El punto de contacto es el Secretario Ejecutivo de la Secretaría de la Convención; No de fax (41 22) 970 9034.

7. Información suplementaria

Primer examen de la información comunicada por las Partes que figuran en el anexo I de la Convención. A/AC.237/81 y Corr.1.

Informes de los exámenes en profundidad de cada uno de los países.

 
EMISIONES DE ÓXIDOS DE AZUFRE
Ambiental Capítulo 9 Impulso

1. Indicador

a) Nombre: Emisiones de óxidos de azufre.

b) Breve definición: Emisiones antropogénicas nacionales de óxidos de azufre (SOx) expresadas en cantidad de dióxido de azufre (SO2).

c) Unidad de medida: Toneladas o miles de toneladas; porcentaje de variación en las emisiones a lo largo del tiempo (por ejemplo, porcentaje de variación de las emisiones entre 1980 y 1995). Denominador propuesto: por habitante, por unidad de producto interno bruto (PIB), por unidad de consumo bruto de energía.

2. Ubicación dentro del marco

a) Programa 21: Capítulo 9: Protección de la atmósfera.

b) Tipo de indicador: Impulso.

3. Significación (pertinencia para la adopción de políticas)

a) Finalidad: El indicador se utiliza para evaluar los resultados de las políticas nacionales sobre medio ambiente y para describir la presión ambiental relacionada con el control de las emisiones en el aire.

b) Pertinencia para el desarrollo sostenible/no sostenible: Las emisiones antropogénicas de óxido de azufre dependen de la estructura industrial y el consumo de energía del país, en los que a su vez influyen la intensidad y la eficiencia en el uso de la energía. También influyen en las emisiones las normas de reducción y control de la contaminación que aplique el país, y la utilización de tecnologías de producción limpias. Esas emisiones son indicio del impacto humano en el medio ambiente a través de la producción y el consumo. Los esfuerzos que realizan los países para reducir las emisiones de óxido de azufre se reflejan en su política nacional y en sus compromisos internacionales. Entre las medidas concretas figuran cambios estructurales en la demanda de energía (ahorro de energía y sustitución de combustible), y políticas y medidas técnicas de lucha contra la contaminación (por ejemplo, instalación de plantas industriales de desazuframiento).

Junto con los compuestos de nitrógeno, los compuestos de azufre son la causa de la acidificación del medio ambiente. Las principales fuentes de las emisiones antropogénicas de óxido de azufre son las plantas de producción de energía, seguidas de los procesos industriales y de la combustión industrial. Las emisiones aéreas de óxidos de azufre incrementan la contaminación a nivel local, y la contaminación a gran escala dado que son transportadas a largas distancias en la atmósfera.

La exposición humana a los óxidos de azufre en el aire incrementa las enfermedades respiratorias y la mortalidad de ellas derivada. Los subgrupos de población más sensibles al dióxido de azufre son los asmáticos y las personas con enfermedades cardiovasculares o enfermedades pulmonares crónicas, los niños y los ancianos.

El dióxido de azufre actúa como precursor del ácido sulfúrico, que puede matar a organismos acuáticos, dañar el hábitat y erosionar los edificios. El azufre es el principal componente del incremento de la acidificación del medio ambiente. El azufre atmosférico no suele ser absorbido por la vegetación, aunque pasa a través del suelo, en forma de sulfato. La deposición de azufre puede ser seca (en forma de gases y partículas), húmeda (en forma de lluvia o nieve), o en forma de condensación (como niebla o gotas de las nubes).

c) Relación con otros indicadores: Además de las emisiones anuales de óxido de azufre y de la variación porcentual de las emisiones, deben facilitarse datos sobre la intensidad de las emisiones expresada como cantidades emitidas por unidad de PIB, por habitante y por unidad de consumo bruto de energía, a fin de evaluar la sostenibilidad. Por consiguiente, los indicadores están estrechamente relacionados con los correspondientes al PIB por habitante, el consumo de combustible de transporte por habitante, el gasto en medidas de reducción de la contaminación del aire, y el consumo anual de energía por habitante. En cierta medida, las emisiones elevadas de dióxido de azufre por unidad de PIB caracterizan a los países que están registrando un rápido crecimiento económico e industrial, o que tienen una producción industrial elevada con respecto a la población. Las emisiones elevadas por unidad de PIB pueden también reflejar la falta de medidas de lucha contra la contaminación por dióxido de azufre y/o la dependencia del carbón con alto contenido de azufre.

d) Objetivos: En lo que respecta a los objetivos internacionales, véase el apartado e) de la sección 3 infra. Algunos países han fijado objetivos nacionales más estrictos que los establecidos en los acuerdos internacionales. Son pocos los que han alcanzado esos objetivos nacionales.

e) Convenios y acuerdos internacionales: En el marco de la Convención sobre la contaminación atmosférica transfronteriza a larga distancia (Ginebra, 1979), se firmó en 1985 y entró en vigor en 1987 el Protocolo de Helsinki, en el que se preveía reducir las emisiones de azufre en un 30% respecto a los niveles de 1980 para 1993. En el marco de esa misma Convención, en 1994 se firmó el Protocolo de Oslo relativo a la fijación de límites máximos para las emisiones de azufre y a la reducción de las emisiones porcentuales.

4. Descripción de la metodología y definiciones en que se basa

En raros casos las emisiones se conocen a través de mediciones directas en las chimeneas o balances de materiales. En general, las emisiones de óxidos de azufre se calculan con ayuda de factores de emisión que reflejan la presencia de compuestos de azufre en distintos tipos de combustibles y en otros productos:

Emisión = (Factor de emisión) x (Nivel de actividad)

Los factores de emisión correspondientes a fuentes estacionarias deben desglosarse por combustibles, instalaciones o sectores económicos. Deben incluir las entradas de energía (gas, petróleo y carbón), los procesos industriales (contaminantes emitidos en la fabricación de productos a partir de materias primas), el consumo de combustibles para usos no industriales, y otras fuentes estacionarias (tratamiento y eliminación de desechos, tratamiento de aguas residuales, actividades agrícolas y quema de escoria de carbón). Los factores de emisión de fuentes móviles deben desglosarse por combustibles y tipos de vehículo. Deben comprender el tráfico por carretera (vehículos de pasajeros, camiones ligeros y pesados, autobuses y motocicletas) y otras fuentes móviles (navegación, ferrocarril, tráfico aéreo y equipo agrícola).

Siempre que sea posible deben utilizarse los factores de emisión nacionales. Si esos factores no se conocen o si se pretende lograr un mayor grado de comparabilidad internacional, pueden utilizarse factores de emisión correspondientes a regiones o combustibles específicos. Sin embargo, los datos obtenidos de esa forma pueden diferir de las estimaciones oficiales. Siguen existiendo diferencias entre los factores de emisión, los métodos de estimación y las definiciones de los distintos países. Normalmente las estimaciones de los años anteriores están sujetas a revisión a medida que se perfeccionan los métodos de estimación. Por consiguiente, es preciso tener en cuenta esas diferencias a la hora de interpretar los datos.

Teniendo en cuenta que el objetivo del conjunto de indicadores es describir el impacto de la actividad humana en el medio ambiente, deben excluirse las emisiones procedentes de fuentes naturales (tales como incendios de bosques y erupciones volcánicas).

En los últimos años, se ha realizado un esfuerzo considerable para normalizar o armonizar el cálculo de los inventarios nacionales de emisiones de óxidos de azufre a fin de mejorar la comparabilidad de las estimaciones nacionales. La Organización Internacional de Normalización (ISO), la Organización Meteorológica Mundial (OMM), la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Comisión Económica para Europa (CEPA), la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) y el Programa europeo de vigilancia y evaluación han trabajado con miras a normalizar los métodos de muestreo y análisis de la contaminación del aire. El grupo de tareas del Programa europeo de vigilancia y evaluación sobre inventarios de las emisiones ha elaborado un conjunto de directrices técnicas para calcular y notificar las emisiones nacionales de dióxido de azufre. Con arreglo a los protocolos de la Convención sobre la contaminación atmosférica transfronteriza a larga distancia de la CEPA, los países signatarios tienen que notificar al Programa europeo de vigilancia y evaluación sus emisiones nacionales con arreglo a esas directrices.

Para relacionar las emisiones con el PIB deben utilizarse paridades de poder adquisitivo en lugar de tipos de cambio, dado que el objetivo de comparar los niveles de actividad económica es reflejar con la mayor exactitud posible los volúmenes y los procesos físicos básicos. A fin de evaluar la sostenibilidad, es importante estudiar la evolución de las emisiones durante un período más largo (15 o 20 años). Las paridades de poder adquisitivo se definen como la relación entre la cantidad en la moneda nacional y la cantidad en la moneda de referencia que se precisa para comprar el mismo grupo de bienes de consumo en los dos países. Normalmente, las paridades de poder adquisitivo son distintas de los tipos de cambio, dado que estos últimos reflejan no sólo los precios relativos de los bienes de consumo, sino toda una serie de otros factores, como las diferencias entre los tipos de interés y las intervenciones del Estado. Por consiguiente, los tipos de cambio presentan unas variaciones a lo largo del tiempo mucho mayores que las paridades de poder adquisitivo.

5. Evaluación de la disponibilidad de datos de fuentes nacionales e internacionales

En la actualidad, la principal tarea que se plantea con respecto a los datos sobre las emisiones de óxido de azufre es incrementar la frecuencia con que se reúnen, elaboran y actualizan a nivel nacional. Las variaciones anuales de las emisiones no pueden calcularse a menos que se disponga de datos anuales. En varios países la práctica sigue siendo publicar inventarios quinquenales de las emisiones.

6. Organismos que intervienen en la determinación del indicador

El organismo principal es la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE). El punto de contacto es el Jefe de la División de Estado del Medio Ambiente de la Dirección de Medio Ambiente de la OCDE; No de fax (33 1) 45 24 78 76.

7. Información suplementaria

Organismo para la Protección del Medio Ambiente de los Estados Unidos (EPA). National Air Quality Trends and Emissions Trends Report, 1993. EPA 454/R-94-026, 1994.

OCDE. Environmental Data Compendium 1995. OCDE, París, 1995.

OCDE. Environmental Indicators: OECD Core Set. OCDE, París, 1994.

Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Informe sobre Datos Ambientales 1993-1994. Basil Blackwell: Oxford, 1993.

También están realizando una labor conexa en ese ámbito el Programa europeo de vigilancia y evaluación, el PNUMA, la CEPA, el Banco Mundial, la Comisión de Desarrollo Sostenible, EUROSTAT y la Agencia Europea del Medio Ambiente.

 
EMISIONES DE ÓXIDOS DE NITRÓGENO
Ambiental Capítulo 9 Impulso

1. Indicador

a) Nombre: Emisiones de óxidos de nitrógeno.

b) Breve definición: Emisiones nacionales antropogénicas de óxidos de nitrógeno (NOx) expresadas como cantidad de dióxido de nitrógeno (NO2).

c) Unidad de medida: Toneladas o miles de toneladas; porcentaje de variación en las emisiones a lo largo del tiempo (por ejemplo, porcentaje de variación de las emisiones entre 1980 y 1995). Denominador propuesto: por habitante, por unidad de producto interno bruto (PIB), por unidad de consumo bruto de energía.

2. Ubicación dentro del marco

a) Programa 21: Capítulo 9: Protección de la atmósfera.

b) Tipo de indicador: Impulso.

3. Significación (pertinencia para la adopción de políticas)

a) Finalidad: El indicador se utiliza para evaluar los resultados de las políticas nacionales sobre medio ambiente y para describir la presión ambiental relacionada con el control de las emisiones en el aire.

b) Pertinencia para el desarrollo sostenible/no sostenible: Las emisiones antropogénicas de óxido de nitrógeno dependen de la estructura industrial y el consumo de energía del país, en los que a su vez influyen la intensidad y la eficiencia en el uso de la energía. También influyen en las emisiones las normas de reducción y control de la contaminación que aplique el país, y la utilización de tecnologías de producción limpias. Esas emisiones son indicio del impacto humano en el medio ambiente a través de la producción y el consumo. Los esfuerzos que realizan los países para reducir las emisiones de óxido de nitrógeno se reflejan en su política nacional y en sus compromisos internacionales. Entre las medidas concretas figuran cambios estructurales en la demanda de energía (ahorro de energía y sustitución de combustibles), y políticas y medidas técnicas de lucha contra la contaminación (por ejemplo, instalación de plantas industriales de desnitrificación y utilización de catalizadores en los vehículos). Por consiguiente, el indicador puede utilizarse para evaluar los resultados de las políticas nacionales para el medio ambiente y para describir la presión que sobre el medio ambiente ejercen la producción y el consumo. Junto con los compuestos de azufre, los compuestos de nitrógeno son la causa de la acidificación del medio ambiente. Las emisiones antropogénicas de óxido de nitrógeno se deben al transporte, así como a otros usos de la energía y procesos industriales. Las emisiones aéreas de óxidos de nitrógeno son causa de contaminación a nivel local, así como de contaminación a gran escala como resultado del transporte a larga distancia en la atmósfera. Otra fuente de nitrógeno son los abonos nitrogenados cuando se utilizan en cantidades excesivas en la agricultura.

Los óxidos de nitrógeno están relacionados con las enfermedades respiratorias y la mortalidad conexa en los humanos. El dióxido de nitrógeno puede irritar las pulmones y reducir la resistencia a las infecciones respiratorias. Todavía no están claros los efectos de la exposición a corto plazo, pero la exposición continuada o frecuente a concentraciones superiores a las que normalmente se encuentran en el aire puede ocasionar una mayor incidencia de las enfermedades respiratorias agudas.

A la luz del sol, los óxidos de nitrógeno reaccionan como compuestos orgánicos volátiles y forman ozono troposférico y otros productos químicos oxidantes; formas de oxígeno que son tóxicas para los seres vivos, incluidos los seres humanos. Además, los óxidos de nitrógeno son un precursor del ácido nítrico en el agua de lluvia y refuerzan el efecto deletéreo del dióxido de azufre en las máquinas, los organismos acuáticos, la agricultura y el hábitat. La deposición atmosférica de óxidos de nitrógeno puede contribuir a la eutroficación. En algunas zonas, los óxidos de nitrógeno son precursores de las concentraciones de materia particulada. La deposición de nitrógeno puede ser seca (en forma de gases y partículas), húmeda (en forma de lluvia o nieve), o en forma de condensación (como niebla y gotas de las nubes).

c) Relación con otros indicadores: Además de las emisiones anuales de óxido de nitrógeno y de la variación porcentual de las emisiones, deben facilitarse datos sobre la intensidad de las emisiones expresada como cantidades emitidas por unidad de PIB, por habitante y por unidad de consumo bruto de energía, a fin de evaluar la sostenibilidad. Por consiguiente, los indicadores están estrechamente relacionados con los correspondientes al PIB por habitante, el consumo de combustible de transporte por habitante, el gasto en medidas de reducción de la contaminación del aire, y el consumo anual de energía por habitante.

d) Objetivos: Véase el apartado e) de la sección 3 infra.

e) Convenios y acuerdos internacionales: En el marco de la Convención sobre la contaminación atmosférica transfronteriza a larga distancia (Ginebra, 1979), en 1991 entró en vigor un protocolo para reducir las emisiones de nitrógeno a su nivel de 1987 antes de 1995 (Sofía, 1988).

4. Descripción de la metodología y definiciones en que se basa

En raros casos las emisiones se conocen a través de mediciones directas en las chimeneas o balances de materiales. En general, las emisiones de óxidos de nitrógeno se calculan con ayuda de factores de emisión que reflejan la presencia de compuestos de azufre en distintos tipos de combustibles y en otros productos:

Emisión = (Factor de emisión) x (Nivel de actividad)

Los factores de emisión correspondientes a fuentes estacionarias deben desglosarse por combustibles, instalaciones o sectores económicos. Deben incluir las entradas de energía (gas, petróleo y carbón), los procesos industriales (contaminantes emitidos en la fabricación de productos a partir de materias primas), el consumo de combustibles para usos no industriales, y otras fuentes estacionarias (tratamiento y eliminación de desechos, tratamiento de aguas residuales, actividades agrícolas y quema de escoria de carbón). Los factores de emisión de fuentes móviles deben desglosarse por combustibles y tipos de vehículo. Deben comprender el tráfico por carretera (vehículos de pasajeros, camiones ligeros y pesados, autobuses y motocicletas) y otras fuentes móviles (navegación, ferrocarril, tráfico aéreo y equipo agrícola).

Siempre que sea posible deben utilizarse los factores de emisión nacionales. Si esos factores no se conocen o si se pretende lograr un mayor grado de comparabilidad internacional, pueden utilizarse factores de emisión correspondientes a regiones o combustibles específicos. Sin embargo, los datos obtenidos de esa forma pueden diferir de las estimaciones oficiales. Siguen existiendo diferencias entre los factores de emisión, los métodos de estimación y las definiciones de los distintos países. Normalmente las estimaciones de los años anteriores están sujetas a revisión a medida que se perfeccionan los métodos de estimación. Por consiguiente, es preciso tener en cuenta esas diferencias a la hora de interpretar los datos.

Teniendo en cuenta que el objetivo del conjunto de indicadores es describir el impacto de la actividad humana en el medio ambiente, deben excluirse las emisiones procedentes de fuentes naturales (tales como relámpagos).

En los últimos años, se ha realizado un esfuerzo considerable para normalizar o armonizar el cálculo de los inventarios nacionales de emisiones de óxidos de nitrógeno a fin de mejorar la comparabilidad de las estimaciones nacionales. La Organización Internacional de Normalización (ISO), la Organización Meteorológica Mundial (OMM), la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Comisión Económica para Europa (CEPA), la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) y el Programa europeo de vigilancia y evaluación han trabajado con miras a normalizar los métodos de muestreo y análisis de la contaminación del aire. El grupo de tareas del Programa europeo de vigilancia y evaluación sobre inventarios de las emisiones ha elaborado un conjunto de directrices técnicas para calcular y notificar las emisiones nacionales de dióxido de azufre. Con arreglo a los protocolos de la Convención sobre la contaminación atmosférica transfronteriza a larga distancia de la CEPA, los países signatarios tienen que notificar al Programa europeo de vigilancia y evaluación sus emisiones nacionales con arreglo a esas directrices.

Para relacionar las emisiones con el PIB deben utilizarse paridades de poder adquisitivo en lugar de tipos de cambio, dado que el objetivo de comparar los niveles de actividad económica es reflejar con la mayor exactitud posible los volúmenes y los procesos físicos básicos. A fin de evaluar la sostenibilidad, es importante estudiar la evolución de las emisiones durante un período más largo (15 o 20 años). Las paridades de poder adquisitivo se definen como la relación entre la cantidad en la moneda nacional y la cantidad en la moneda de referencia que se precisa para comprar el mismo grupo de bienes de consumo en los dos países. Normalmente, las paridades de poder adquisitivo son distintas de los tipos de cambio, dado que estos últimos reflejan no sólo los precios relativos de los bienes de consumo, sino toda una serie de otros factores, como las diferencias entre los tipos de interés y las intervenciones del Estado. Por consiguiente, los tipos de cambio presentan unas variaciones a lo largo del tiempo mucho mayores que las paridades de poder adquisitivo.

5. Evaluación de la disponibilidad de datos de fuentes nacionales e internacionales

En la actualidad, la principal tarea que se plantea con respecto a los datos sobre las emisiones de óxido de nitrógeno es incrementar la frecuencia con que se reúnen, elaboran y actualizan a nivel nacional. Las variaciones anuales de las emisiones no pueden calcularse a menos que se disponga de datos anuales. En varios países la práctica sigue siendo publicar inventarios quinquenales de las emisiones.

6. Organismos que intervienen en la determinación del indicador

El organismo principal es la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE). El punto de contacto es el Jefe de la División de Estado del Medio Ambiente de la Dirección de Medio Ambiente de la OCDE; No de fax (33 1) 45 24 78 76.

7. Información suplementaria

Organismo para la Protección del Medio Ambiente de los Estados Unidos (EPA). National Air Quality Trends and Emissions Trends Report, 1993. EPA 454/R-94-026, 1994.

OCDE. Environmental Data Compendium 1995. OCDE, París, 1995.

OCDE. Environmental Indicators: OECD Core Set. OCDE, París, 1994.

Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Informe sobre Datos Ambientales 1993-1994. Basil Blackwell: Oxford, 1993.

También están realizando una labor conexa en ese ámbito el Programa europeo de vigilancia y evaluación, el PNUMA, la CEPA, el Banco Mundial, la Comisión de Desarrollo Sostenible, EUROSTAT y la Agencia Europea del Medio Ambiente.

 

CONSUMO DE SUSTANCIAS QUE AGOTAN LA CAPA DE OZONO
Ambiental Capítulo 9 Impulso

1. Indicador

a) Nombre: Consumo de sustancias que agotan la capa de ozono.

b) Breve definición: Cantidad de sustancias que agotan la capa de ozono que están siendo eliminadas como resultado del Protocolo de Montreal.

c) Unidad de medida: Toneladas ponderadas de sustancias que agotan la capa de ozono.

2. Ubicación dentro del marco

a) Programa 21: Capítulo 9: Protección de la atmósfera.

b) Tipo de indicador: Impulso.

3. Significación (pertinencia para la adopción de políticas)

a) Finalidad: Este indicador refleja el compromiso de los países que han ratificado el Protocolo de Montreal de suprimir las sustancias que agotan la capa de ozono.

b) Pertinencia para el desarrollo sostenible/no sostenible: La eliminación de las sustancias que agotan la capa de ozono, y su sustitución por sustancias menos dañinas, dará lugar a la recuperación de la capa de ozono y a la utilización de productos más sostenibles. El ozono de la estratosfera absorbe la mayor parte de la radiación ultravioleta dañina desde un punto de vista biológico (UV-B). Sin la acción de filtro de la capa de ozono puede penetrar en la atmósfera más radiación UV-B, lo que puede tener graves efectos para la salud humana, los animales, las plantas, los microorganismos, la vida marina, los materiales, los ciclos biogeoquímicos y la calidad del aire.

c) Relación con otros indicadores: Este indicador está relacionado con otros indicadores ambientales e institucionales, como el número de productos químicos prohibidos o restringidos y la ratificación de acuerdos internacionales. Tiene repercusiones importantes para la salud humana y los recursos naturales.

d) Objetivos: El objetivo fijado en los acuerdos que se enumeran en el apartado e) de la sección 3 infra es la supresión completa de las sustancias que agotan la capa de ozono.

e) Convenios y acuerdos internacionales: Convenio de Viena para la Protección de la Capa de Ozono y Protocolo de Montreal relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono.

4. Descripción de la metodología y definiciones en que se basa

a) Definiciones y conceptos básicos: Por sustancia que agota la capa de ozono se entiende cualquier sustancia orgánica que contenga cloro o bromo, que destruye la capa de ozono de la estratosfera. Por producción se entiende la cantidad de sustancias controladas y notificadas producida, menos la cantidad destruida mediante tecnologías que han de ser aprobadas por las Partes en el Protocolo de Montreal, y menos la cantidad utilizada por completo como materia prima para la fabricación de otros productos químicos. La cantidad reciclada y reutilizada no se considera "producción". Por consumo se entiende la suma de la producción y de las importaciones menos las exportaciones de sustancias controladas. Por toneladas ponderadas de sustancias que agotan la capa de ozono se entiende la cantidad de sustancias que agotan la capa de ozono multiplicada por su potencial de agotamiento del ozono. El potencial de agotamiento del ozono es un índice relativo de la capacidad de una sustancia de agotar el ozono.

Se asigna un nivel de referencia de 1 como índice para el CFC-11 y el CFC-12. Si un producto tiene un potencial de agotamiento del ozono de 0,5, el peso del producto en la atmósfera agotaría la mitad de ozono que ese mismo peso de CFC-11 o CFC-12. El potencial de agotamiento del ozono se calcula a partir de modelos matemáticos que tienen en cuenta factores tales como la estabilidad del producto, el ritmo de difusión, la cantidad de átomos con capacidad para agotar el ozono por molécula, y el efecto de la luz ultravioleta y de otras radiaciones en las moléculas.

b) Métodos de medición: Las toneladas ponderadas de sustancias que agotan el correspondientes a la producción son la suma de la producción anual nacional (en toneladas) de cada sustancia controlada (notificada a la Secretaría del Ozono de conformidad con el artículo 7 del Protocolo de Montreal) multiplicada por la capacidad de agotamiento del ozono de esa sustancia (según figura en los anexos A, B, C y E del Manual del Protocolo de Montreal relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono, 1993).

Las toneladas ponderadas de sustancias que agotan la capa de ozono correspondientes al consumo se obtienen mediante un cálculo similar utilizando los valores del consumo anual nacional (en toneladas).

c) El indicador dentro del marco de impulso-estado-reacción: La producción y el consumo de sustancias que agotan la capa de ozono representan un impulso dentro del marco de impulso-estado-reacción.

d) Limitaciones del indicador: La capacidad de un país para utilizar este indicador dependerá de la disponibilidad de datos y de su exactitud, así como de su pronta notificación. El indicador en sí no facilita información sobre la evolución actual del deterioro de la capa de ozono porque los efectos en los ecosistemas no son inmediatos.

e) Otras posibles definiciones: Como alternativa, el indicador podría centrarse en la eliminación de las sustancias que agotan la capa de ozono.

5. Evaluación de la disponibilidad de datos de fuentes nacionales e internacionales

a) Datos necesarios para determinar el indicador: Datos sobre la producción, las importaciones y las exportaciones de sustancias controladas por las Partes en el Protocolo de Montreal.

b) Disponibilidad de datos: La mayoría de los países recogen anualmente datos a nivel nacional en el marco de sus obligaciones de notificación conforme al Protocolo de Montreal.

c) Fuentes de datos: Pueden obtenerse datos de la Secretaría del Ozono y del ministerio nacional encargado de las notificaciones conforme al Protocolo de Montreal.

6. Organismos que intervienen en la determinación del indicador

a) Organismo principal: El organismo principal es el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). El punto de contacto es el Director del Programa de Evaluación del Medio Humano, PNUMA; No de fax (254 2) 62 42 74.

b) Otras organizaciones: También tienen interés en el perfeccionamiento de este indicador el Grupo de Evaluación Tecnológica y Económica del Protocolo de Montreal, las Partes en el Protocolo de Montreal, la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), y los miembros asociados del Alternative Fluorocarbon Environmental Acceptability Study (AFEAS).

7. Información suplementaria

a) Otras lecturas:

Secretaría del Ozono. Handbook for the Montreal Protocol on Substances that Deplete the Ozone Layer. 1993.

Informes del Grupo de Evaluación Económica y Tecnológica del Protocolo de Montreal.

Notificación de datos de las Partes en el Protocolo de Montreal relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono.

Solomon y Albritton. Time-dependent Ozone Depleting Potentials for Short and Long Term Forecast. Nature, vol. 356, 7/5/92.

Medio ambiente del Canadá. Environmental Indicator Bulletin for Stratospheric Ozone. Informe sobre el estado del medio ambiente en el mundo, 1995.

Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Comité asesor técnico especial sobre tecnologías de destrucción de las sustancias que agotan la capa de ozono. 1992.

b) Otros contactos:

Coordinador de la Secretaría del Convenio de Viena para la Protección de la Capa de Ozono; No de fax (254 2) 226886.

Jefe de la División de Coordinación, Medio Ambiente Mundial, Banco Mundial; No de fax (1 202) 522 3256.

Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI); No de fax (43 1) 211 232156.

Asesor técnico principal, Grupo de medio ambiente y recursos naturales, Dirección de Política y Evaluación de Programas, Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD); No de fax (1 212) 906 6947.

Director de la Oficina de Industria y Medio Ambiente del PNUMA (Centro de Actividades de Programas para la Industria y el Medio Ambiente del PNUMA); No de fax (33 1) 4437 1474.

Oficial principal del Fondo Multilateral para la Aplicación del Protocolo de Montreal; No de fax (1 514) 282 0068.

Administrador del proyecto AFEAS, Alternative Fluorocarbon Environmental Acceptability Study (AFEAS); No de teléfono (1 202) 789 1201.

Dirección del Medio Ambiente, OCDE; No de fax (33 1) 45 24 78 76.

 
CONCENTRACIONES DE CONTAMINANTES EN EL AIRE AMBIENTE
DE LAS ZONAS URBANAS
Ambiental Capítulo 9 Estado

1. Indicador

a) Nombre: Concentraciones de contaminantes en el aire ambiente de las zonas urbanas.

b) Breve definición: Concentraciones de contaminación en el aire ambiente de ozono, monóxido de carbono, partículas en suspensión, dióxido de azufre, dióxido de nitrógeno y monóxido de nitrógeno.

c) Unidad de medida: fg/m3 o ppmm (partes por mil millones) de todos los contaminantes con excepción del monóxido de carbono, que se mide en mg/m3 o ppm (partes por millón).

2. Ubicación dentro del marco

a) Programa 21: Capítulo 9: Protección de la atmósfera.

b) Tipo de indicador: Estado.

3. Significación (pertinencia para la adopción de políticas)

a) Finalidad: Medir la exposición de las personas a los distintos contaminantes del aire.

b) Pertinencia para el desarrollo sostenible/no sostenible: El porcentaje de la población mundial que vive en zonas urbanas es cada vez mayor. La mayoría de las fuentes de contaminación suelen encontrarse en las zonas urbanas o en sus proximidades. Como resultado de ello, el mayor potencial de exposición humana a unas condiciones ambientales perjudiciales y a los consiguientes problemas de salud corresponde a las zonas urbanas. La mejora de la calidad del aire es un aspecto importante de la promoción de los asentamientos humanos sostenibles.

Es preciso conocer las concentraciones de contaminantes en el aire a fin de limitar las zonas en las que no se cumplen las normas o directrices sobre calidad del aire, y para establecer unas medidas adecuadas de control de las fuentes de contaminación. Es importante tener presente que los efectos sinérgicos de esos contaminantes pueden incrementar las posibilidades de que tengan efectos perjudiciales para la salud.

c) Relación con otros indicadores: Este indicador está estrechamente vinculado a otros relacionados con las causas, los efectos y la reacción de la sociedad. Entre ellos figuran, como ejemplo, los indicadores relativos a la tasa de crecimiento demográfico, la tasa de crecimiento de la población urbana, el porcentaje de la población que vive en zonas urbanas, el consumo anual de energía por habitante, las emisiones de óxidos de azufre y óxidos de nitrógeno, la esperanza de vida al nacer, el gasto total en atención a la salud como porcentaje del producto national bruto, el porcentaje del consumo que representan las fuentes de energía renovables, los gastos en protección del medio ambiente como porcentaje del producto interno bruto, y los gastos en medidas de reducción de la contaminación del aire.

d) Objetivos: La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha establecido directrices sobre la calidad del aire para todos los contaminantes recogidos en este indicador, con excepción del monóxido de nitrógeno. Muchos países disponen de sus propias normas sobre calidad del aire con respecto a muchos de estos contaminantes.

e) Convenios y acuerdos internacionales: No disponibles.

4. Descripción de la metodología y definiciones en que se basa

a) Definiciones y conceptos básicos: La vigilancia de la contaminación del aire se realiza mediante muestreos aleatorios representativos y análisis químicos de muestras de aire y la comparación de los parámetros estadísticos locales (tales como medias aritméticas o geométricas, percentiles) con las normas o directrices sobre calidad del aire. Las muestras de aire pueden incluir muestras de aire de espacios abiertos y espacios cerrados.

b) Métodos de medición:

i) Ozono:

Pasivos
Reactivo Producto de reacción
Análisis
1,2, -di-(4-piridil) etileno (DPE);
Carmín índigo;
NaNO2 + Na2CO3 + glicerina;


KI (compensado hasta pH 9) 
Aldehído;

 Nitrato;

 

Complejo I

Espectrofotometría;

Reflectancia;
Cromatografía iónica o espectrofotometría;Espectrofotometría

Activos
Solución de absorción Producto de reacción Análisis
Yoduro potásico;
5.5'-Ácido sulfónico de índigo

 Yoduro;

 Espectrofotometría;Espectrofotometría 

Automáticos: Quimioluminiscencia, absorción de rayos ultravioletas. 

ii) Monóxido de carbono: 

Pasivos
Reactivo Producto de reacción Análisis

 

Tenax (absorbente de zeolita)
  Desorción térmica GC-FID tras su conversión a metano 

Activos
Solución de absorción Producto de reacción Análisis
   

Conductometría

Automáticos: Absorción de infrarrojos no dispersiva, método de correlación de filtros de gas. 

iii) Partículas suspendidas: 

Activos 
Método Análisis
Humo negro
Muestras de alto volumen
Absorción de rayos beta
Vigilancia del tamaño de las partículas
Reflectometría
Gravidimetría
Atenuación de rayos beta
Gravidimetría

Automáticos: Absorción de rayos beta. 

iv) Dióxido de azufre: 

Pasivos
Reactivo Producto de reacción Análisis

 

Tetracloromercurato (TCM;West-Gaeke);
TEA (+glicol);


KOH (+glicerol)


Na2CO3 (+glicerina);
TEA + Na2CO3

Sulfito;

Sulfito;


Sulfato;



Sulfato;

Espectrofotometría
(pararosanilina);
Espectrofotometría
(pararosanilina);

Espectrofotometría
(iones de bario + DMSA);
Cromatografía de cambio de iones;

Método de Thorin después del cambio de iones

Activos

 
Solución de absorción Producto de reacción Análisis
Agua oxigenada;

 

 

Tetracloromercurato de sodio;

 
Filtro impregnado de hidróxido de potasio

 

Ácido sulfúrico;

 

 

Complejo dicloro- sulfito-mercurato;

Sulfato

 

Análisis volumétrico con tetraborato de sodio,
Cromatografía de cambio de iones;
Espectrofotometría
Colorimetría;


Espectrofotometría

Automáticos: Conductometría, fluorescencia de la radiación ultravioleta. 

v) Dióxido de nitrógeno: 

Pasivos
Reactivo Producto de reacción Análisis
Trietanolamina (TEA);
NaI + Na2CO3 
Nitrito
Nitrito
Cromatografía de cambio de iones o espectrofotometría

Activos
Solución de absorción Producto de reacción Análisis
Solución alcalina;


Trietanolamina, Guaiacol, Metabisulfito de sodio (TGS);

Cuentas de vidrio cubiertas de yoduro potásico y arsenito de sodio
 

Nitrito;

 
Nitrito;

 
Nitrito

Espectrofotometría, colorimetría (ácido sulfanílico (+ dihidrocloruro de N-(1-naftil)-etilendiamina) (NEDA);

Espectrofotometría (sulfanilamida + sal amónica de ácido 8-anilino-1- naftalensulfónico (ANSA);

 Espectrofotometría, (ácido sulfanílico + NEDA)

Automáticos: Quimioluminiscencia. 

vi) Monóxido de nitrógeno: 

Pasivos
 
Reactivo Producto de reacción Análisis
CrO3 (oxidación), TEA
 
Nitrito  Espectrofotometría

Activos
 
Solución de absorción Producto de reacción Análisis
Oxidación a dióxido de nitrógeno y solución alcalina

 
Oxidación a dióxido de nitrógeno y trietanolamina,
Guaiacol, Metabisulfito de sodio (TGS);

 Oxidación a dióxido de nitrógeno y cuentas de vidrio cubiertas de yoduro potásico y arsenito de sodio

Nitrito;

 

Nitrito;

 

Nitrito

 

Espectrofotometría, colorimetría (ácido sulfanílico + dihidrocloruro de N-(1-naftil)-etilendiamina (NEDA);

Espectrofotometría (sulfanilamida + sal amónica de ácido 8-anilino-1- naftalensulfónico (ANSA));

Espectrofotometría, (ácido sulfanílico + NEDA)

 

Automáticos: Quimioluminiscencia tras oxidación con dióxido de nitrógeno.

c) El indicador dentro del marco de impulso-estado-reacción: Este indicador mide el estado de la calidad del aire en las zonas urbanas. 

d) Limitaciones del indicador: Las limitaciones de este indicador están relacionadas con el nivel de detección y la exactitud de las lecturas con respecto al valor máximo registrado. Son las siguientes:

 
Contaminante Límite de detección Precisión
Ozono alrededor de 1 fg/m3 por debajo del 2%
Monóxido de carbono alrededor de 1 fg/m3 por debajo del 1%
Partículas suspendidas alrededor de 1 fg/m3 por debajo del 2%
Dióxido de azufre alrededor de 1 fg/m3 5-8,5% como mínimo; 2,5-6% en los laboratorios de alta precisión
Dióxido de nitrógeno alrededor de 1 fg/m3 4,5-7% como mínimo; 2,5-5% en los laboratorios de alta precisión
Monóxido de nitrógeno alrededor de 1 fg/m3 4,5-7% como mínimo; 2,5-5% en los laboratorios de alta precisión

 e) Otras posibles definiciones: No disponibles.

5. Evaluación de la disponibilidad de datos de fuentes nacionales e internacionales 

a) Datos necesarios para determinar el indicador: Concentraciones representativas desde un punto de vista cronológico y espacial que permitan estimar parámetros estadísticos por ubicaciones con un grado de precisión de hasta 1 fg/m3. 

b) Disponibilidad de datos: Los organismos nacionales que se ocupan del medio ambiente y la salud recogen normalmente datos sobre la calidad del aire.

c) Fuentes de datos: Inventarios nacionales de concentración de la contaminación en el aire ambiente; Sistema Mundial de Vigilancia del Medio Ambiente (SIMUVIMA) para el Aire; y bases de datos internacionales de, por ejemplo, la Unión Europea o la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos. 

6. Organismos que intervienen en la determinación del indicador

El organismo principal es la Organización Mundial de la Salud (OMS). El punto de contacto es el Director de la División de Apoyo Operacional a la Higiene del Medio de la OMS; No de fax (41 22) 791 4159. 

7. Información suplementaria 

Sistema Mundial de Vigilancia del Medio Ambiente (SIMUVIMA/Aire). Methodology Review Handbook Series, vols. 2, 3, y 4. 

Directrices europeas sobre la calidad del aire. Environmental Health Criteria for Ozone, Carbon Monoxide, Sulphur Dioxide, and Oxides of Nitrogen. 

OMS. Estrategia Mundial de Salud para Todos en el Año 2000. Ginebra. 1981. 

OMS. Noveno programa general de trabajo para el período 1996-2001. Ginebra. 1994. 

OMS. Development of Indicators for Monitoring Progress towards Health for All by the Year 2000. Ginebra. 1981 

Urban Air Pollution in Megacities of the World.


 

GASTOS EN MEDIDAS DE REDUCCIÓN DE LA CONTAMINACIÓN
DEL AIRE

Ambiental Capítulo 9 Reacción

1. Indicador 

a) Nombre: Gastos en medidas de reducción de la contaminación del aire. 

b) Breve definición: Los gastos en medidas de reducción de la contaminación del aire comprenden las inversiones y el gasto corriente dirigidos directamente a medidas de reducción y lucha contra la contaminación en los que incurren el sector público, el sector empresarial y, si corresponde, las unidades familiares. 

c) Unidad de medida: Dólares EE.UU.

2. Ubicación dentro del marco 

a) Programa 21: Capítulo 9: Protección de la atmósfera. 

b) Tipo de indicador: Reacción. 

3. Significación (pertinencia para la adopción de políticas) 

a) Finalidad: La finalidad del indicador es medir los gastos en medidas de reducción de la contaminación del aire, como reacción de la sociedad.

b) Pertinencia para el desarrollo sostenible/no sostenible: Los gastos en medidas de reducción de la contaminación del aire proporcionan una indicación general de los esfuerzos financieros de un país destinados a luchar contra la contaminación del aire. No obstante, en cifras absolutas, su pertinencia para fines de política es limitada y tienen que cotejarse con otras variables, tales como el producto interno bruto (PIB) o la formación bruta de capital fijo. La relación entre los gastos en medidas de reducción de la contaminación del aire y el estado del medio ambiente sólo puede examinarse si se dispone de información complementaria sobre el contexto general del país. Sin ese contexto, unos gastos elevados en medidas de reducción de la contaminación pueden ser indicio de baja calidad del medio ambiente (situación que hace necesarios los gastos) o de calidad elevada (que ha mejorado como resultado de los gastos en medidas de reducción de la contaminación). Por ello, es preciso interpretar con cautela la evolución de los gastos en medidas de reducción de la contaminación: si en un momento dado todos los procesos de producción utilizan tecnologías más limpias y no se crean nuevas emisiones, no se requerirán más medidas de reducción de la contaminación. Por consiguiente, a largo plazo, los gastos en medidas de reducción de la contaminación del aire pueden tender a reducirse. 

c) Relación con otros indicadores: Este indicador está estrechamente relacionado con otros de la categoría socioeconómica y ambiental, tales como el PIB por habitante, el consumo de combustible de transporte por habitante, las emisiones de SOx y NOx y las reducciones de esas emisiones, y el consumo anual de energía por habitante.

d) Objetivos: No se han fijado objetivos para este indicador.

e) Convenios y acuerdos internacionales: No disponibles. 

4. Descripción de la metodología y definiciones en que se basa 

Las medidas de lucha contra la contaminación del aire se definen como medidas encaminadas a prevenir, reducir y eliminar la contaminación. La lucha contra la contaminación del aire incluye las siguientes actividades: vigilancia y reglamentación de la contaminación atmosférica, prevención de la contaminación del aire relacionada con los procesos de producción, instalación de tecnologías no contaminantes (tecnologías limpias y utilización de productos limpios en los procesos de producción), y eliminación de emisiones en la fuente (equipo de desempolvado y filtros). 

La reducción y el control de los residuos de los procesos de producción puede efectuarse mediante tecnologías de depuración que acompañan un proceso de producción determinado, o cambiando el propio proceso. La inversión en tecnologías de depuración no cambia el proceso de producción y el desembolso corresponde exclusivamente a actividades de lucha contra la contaminación. La dificultad que entrañan las tecnologías integradas (cambio en la producción) estriba en establecer qué porcentaje del costo total debe asignarse a medidas de reducción de la contaminación, habida cuenta de que podrían existir otros motivos que justificaran la adquisición de equipo nuevo, por ejemplo, mejorar la capacidad de producción a fin de atender a la creciente demanda. 

El alcance de este indicador es problemático. Puede ser relativamente limitado, de manera que comprenda exclusivamente las inversiones iniciales y los gastos de funcionamiento de las medidas de lucha contra la contaminación industrial. En un enfoque más amplio se tendrían en cuenta las actividades de investigación y desarrollo, los aparatos para depurar las emisiones de los vehículos, los sistemas de control del tráfico, etc. Ello hace que resulte difícil efectuar comparaciones entre países. 

Los datos sobre el gasto de inversión en medidas de reducción de la contaminación del aire son la base para calcular el costo de la inversión en medidas de reducción de la contaminación del aire. Es importante observar la diferencia que existe entre ambos términos: la estimación de los costos requiere establecer hipótesis adecuadas sobre la vida útil, los tipos de interés y otros parámetros. Desde el punto de vista de la evaluación de las repercusiones económicas de las políticas ambientales, sería preferible examinar el costo en lugar del gasto. 

Al examinar la unidad de medida, deberían utilizarse las paridades de poder adquisitivo (PPA) en vez de los tipos de cambio, dado que el objetivo de comparar niveles de actividad económica tales como el PIB es reflejar con la mayor exactitud posible los volúmenes y procesos físicos básicos. Por paridad de poder adquisitivo se entiende la relación entre la cantidad de moneda nacional y la cantidad de moneda de referencia necesaria para comprar la misma cantidad de bienes de consumo en los dos países. Normalmente, las paridades de poder adquisitivo difieren de los tipos de cambio porque estos últimos reflejan no sólo los precios relativos de los bienes de consumo, sino toda una serie de otros factores, entre los que figuran los movimientos internacionales de capital, las diferencias en los tipos de interés y las intervenciones del Estado. Por consiguiente, los tipos de cambio presentan una variación mucho mayor a lo largo del tiempo que las paridades de poder adquisitivo. 

5. Evaluación de la disponibilidad de datos de fuentes nacionales e internacionales 

Se requieren datos sobre las inversiones del sector público y el sector privado y los costos corrientes de las medidas de reducción de la contaminación del aire. Los países suelen tener dificultades para singularizar las inversiones ambientales (o identificar el componente ambiental de una inversión) y, por consiguiente, es probable que muchos países no puedan disponer en un futuro próximo de datos sobre gastos en medidas de lucha contra la contaminación. La Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) es un organismo internacional que recoge datos sobre gastos en medidas de reducción y control de la contaminación en sus países miembros. Por consiguiente, se dispone de datos periódicos suficientemente armonizados sobre la mayoría de los países miembros de la OCDE. En otros países pueden obtenerse algunos datos sobre gastos de los informes nacionales o de estudios experimentales. Son pocos los países que pueden distinguir entre los gastos en medidas de reducción de la contaminación del gobierno central y los de las administraciones locales. 

6. Organismos que intervienen en la determinación del indicador

El organismo principal es la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE). El punto de contacto es el Jefe de la División de Estado del Medio Ambiente de la Dirección del Medio Ambiente de la OCDE; No de fax (33 1) 45 24 78 76. 

7. Información suplementaria 

OCDE. Pollution Abatement and Control Expenditure in OECD Countries. OECD Environment Monographs No 75, París, 1993. 

El cuestionario sobre gastos en medidas de reducción y control de la contaminación y las definiciones correspondientes han sido aprobados por el Grupo de integración de políticas económicas y ambientales de la OCDE. 

También realizan actividades en este ámbito la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa (CEPA), EUROSTAT y la Agencia Europea del Medio Ambiente. 

 

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15 December 2004