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Pulso Mundial - Sistema Mundial de Alerta sobre Impactos y Vulnerabilidades

LUCHANDO PARA INVERTIR EN EL FUTURO

A diferencia de las crisis anteriores, hasta ahora se han encontrado pocas pruebas del brusco incremento de los índices de deserción escolar. Esto puede ser resultado del impulso mundial para promover la "Educación para Todos", ya que muchos países no han aplicado tasas escolares en la enseñanza primaria durante la última década. No obstante, los datos de una serie de países muestran que la escolarización se ha vuelto más irregular.

En Nueva Delhi, los recogedores de basura escolarizan a sus hijos a pesar del duro esfuerzo que les supone, pero los niños abandonan los estudios pronto para ponerse a trabajar. En una ocasión, un padre construyó una chabola desde la que sus hijos podían vender cacahuetes después de las horas de clase.22

Elizabeth, de 12 años, de la escuela de Lenana, espera a recibir su nuevo uniforme escolar.
Nakuru (Kenya): Elizabeth, de 12 años, de la escuela de Lenana,
espera a recibir su nuevo uniforme escolar. Pese a que no haya
informes del dramático crecimiento de los índices de deserción
escolar como resultado de la desaceleración económica mundial,
hay indicadores de que la asistencia es cada vez más irregular.
© 2008 Frederic Courbet/Panos

Los datos de la observación en Nepal revelan que las tasas de escolarización se ven afectadas por los precios de los alimentos. Es menos probable que los niños quieran andar hasta la escuela o centrarse en aprender cuando están hambrientos, o si carecen de vestimenta apropiada o materiales escolares.23

En Sana, una madre de seis niños informó de que sus hijos estaban turnándose para llevar el par de zapatos que tenían a la escuela.24

Los informes de Ghana revelan que reducciones repentinas en los flujos de las remesas de fondos han dificultado el pago a tiempo de los derechos de matrícula, por lo que los niños a veces vuelven tarde a la escuela.25

También se teme que la tasa de deserción escolar pueda incrementarse considerablemente durante la transición de la escuela primaria a la secundaria. Además, la crisis puede tener consecuencias posteriores considerables. Por ejemplo, la desnutrición, sobre todo en los niños durante los dos primeros años de vida, puede tener repercusiones importantes en las capacidades cognitivas y el desarrollo en la primera infancia.

PAGAR MÁS POR MENOS

Los informes de muchos países revelan que una dieta nutritiva, y a veces el combustible necesario para prepararla, se ha vuelto más difícil de costear para muchas personas. En algunos países, las mujeres están reemplazando el gas o el queroseno, más costosos, por leña para cocinar, aumentando su carga de trabajo y de problemas potenciales de salud. Los testimonios subrayan que las personas consideran su nivel de alimentación como el mejor y único indicador de su bienestar.26

Los precios de los alimentos todavía son un gran motivo preocupación. Los resultados locales están en consonancia con los informes mundiales acerca de que los precios continúan siendo más elevados que durante el período anterior a la crisis de los precios de los alimentos, entre finales de 2007 y principios de 2008.27 Las sequías en grandes partes del África Oriental han causado un aumento del hambre en 2009. Se esperan mejores cosechas para el 2010, ya que de nuevo hay precipitaciones, pero el hambre ahora se avecina en parte del Sahel, incluido el Níger.

Los informes cualitativos en este campo brindan una situación contradictoria.

En algunos lugares, el acceso a los alimentos ha mejorado ligeramente durante el último año. Los niños en edad escolar en Nairobi (Kenya) informaron de que en sus hogares recibían dos comidas al día, en comparación con el año anterior, en el que recibían una única comida.28

No obstante, en otras partes de Kenya esta situación todavía es motivo de preocupación. En Lango Baya, la mayoría de las personas todavía siguen alimentándose con una comida al día a base de ugali y verduras.29

Las personas que viven con el VIH/SIDA informaron de que hacían dos comidas al día, pero que esta cantidad les resultaba insuficiente: Sus médicos les habían dicho que debían comer más a menudo para que sus medicamentos antirretrovirales hiciesen efecto.30

En los hogares kenianos entrevistados, se informó de que los niños eran los primeros en ser alimentados, los adultos compartían los alimentos restantes, y no se daba preferencia a los hombres. Un dirigente local describió la situación de la siguiente manera: "Algunas personas pueden pasar dos días o incluso más sin encender fuego en sus hogares, lo que significa que no tienen alimentos que cocinar durante tales días".31

Con alimentos y combustible más difíciles de costear, los primeros informes indican que cada vez es menos probable que las mujeres se desplacen para recibir atención prenatal, y éstas están peor alimentadas durante el embarazo, a pesar de que todavía no haya datos concluyentes. Como los presupuestos de los hogares están restringidos, también hay una creciente presión en los servicios públicos gratuitos.

Es probable que la lactancia y los niveles de nutrición infantiles en edad temprana también se vean afectados. Una mujer en Sana contó que estaba intentando alimentar a su hijo visiblemente desnutrido a base de té y galletas baratas, puesto que no podía seguir comprando leche. Su propia leche materna se le había secado debido al qat, que masticaba como inhibidor del apetito.32

Las mujeres se reúnen en el pueblo de Kalacha para escuchar a los trabajadores de asistencia humanitaria.
Desierto de Chalbi (Kenya): Las mujeres se reúnen en el pueblo de
Kalacha para escuchar a los trabajadores de asistencia humanitaria.
La crisis económica mundial ha agravado los efectos de la sequía que
ha habido durante tres años en esta región.
© 2008 Frederic Courbet/Panos

Voces de los Vulnerables

Una mujer en Fiji cuenta su historia33

Emily sabe bien lo que es vivir en la pobreza. Esta mujer de Fiji, que ya ha cumplido los sesenta, tiene que arreglárselas para vivir con los 60 dólares de Fiji al mes (30 dólares de los EE.UU.) que la Oficina de Bienestar Social le proporciona. Desde que su hijo murió, hace dos años, no ha estado en condiciones de trabajar. Enfrentándose a los crecientes gastos de subsistencia y a la falta de oportunidades, Emily lucha cada día por salir adelante: "Los precios de los alimentos y las tarifas de los autobuses han aumentado. Ahora ya no puedo seguir comprando galletas o fideos. Antes solía comprar tres litros de queroseno, ahora solo puedo comprar dos. Hoy es el decimocuarto día del mes, y ya no me queda más queroseno. A veces tengo que recoger leña y cocinar al fuego fuera de casa. Y algunos días no como".

Voces de los Vulnerables:

Una mujer en Bishkek (Kirguistán)34

Ahora compramos...harina de peor calidad, menos carne... Para nuestra familia de seis personas adquirimos 1,2 kilogramos de carne al mes, y la echamos en nuestros platos, simplemente para que parezca que hay carne...Los ingresos de toda la familia van para comida, rara vez compramos ropa para nuestros hijos... Cuando aumenten los gastos de electricidad, sinceramente, no sé qué va a ser de nosotros... ¡Ya tengo muchas deudas!

Gulmira y Joldoshbek viven con sus tres hijos en una pequeña habitación sin ventanas en una fábrica de ladrillos abandonada.
Bishkek (Kirguistán): Gulmira y Joldoshbek viven con sus tres hijos
en una pequeña habitación sin ventanas en una fábrica de ladrillos
abandonada. Se mudaron hace algunos años desde Naryn para buscar
empleo, pero sólo Gulmira lo encontró. Su salario no es suficiente para
alimentar a toda la familia. © 2009 William Daniels/Panos

VIVIR JUNTOS RESULTA CADA VEZ MÁS DIFÍCIL

Las pruebas realizadas a nivel comunitario revelan que la serie de crisis de los últimos años ha puesto trabas a la cohesión social, ocasionando nuevas tensiones sociales y limitando los ámbitos en los que la gente permanece unida.

Para muchas personas, es de los vecinos, parientes y otros miembros de la comunidad de quienes más dependen para los pequeños préstamos monetarios o alimentarios en su día a día. Pero en todas partes parece que cada vez es más difícil solicitar ayuda local, ya que el impacto de la crisis ha sido tanto extenso como profundo, e incluso la clase media se ha visto empobrecida en muchos lugares.

Las personas que dependen de la mendicidad para su sustento, entre las que se incluyen personas mayores y discapacitados, se encuentran con que tienen que recorrer mayores distancias para recibir una asistencia que antes era gratuita como parte de las obligaciones religiosas.

También informaron de que tenían que soportar peores vejaciones de las que antes aguantaban.35

En Kirguistán, la creciente migación como respuesta a la crisis ha sido la causante de que las familias se vean obligadas a dejar a sus hijos al cuidado de instituciones, con informes de que algunos niños están sufriendo las consecuencias de una atención insuficiente y de la angustia psicológica.36

Tanto en Kenya como en Zambia, el aumento del consumo de alcohol es un tema de preocupación. En algunos lugares, existen informes acerca de las presión ejercida sobre los hombres como probables sostenes de la familia, el conflicto sobre las funciones de género y la desintegración de la familia.37

La crisis parece haber llevado a algunos hogares al límite de su capacidad de afrontamiento: Desde Nairobi, están empezando a llegar informes de padres que abandonan sus responsabilidades domésticas a favor de la bebida.38

Pero también hay algunos informes positivos. En lugares donde la inflación de los precios de los alimentos ha disminuido de forma sustancial, las sociedades parecen estar reparando relaciones que se habían relajado durante los impactos económicos en el período 2008-2009.

En Kalimantan (Indonesia) están resurgiendo los ahorros locales y las cooperativas de ahorro – a pesar de que aún no se hayan recuperado por completo - tras un período en el que varias se habían encontrado paralizadas.39

En Dhaka (Bangladesh), una ermita sufí que alimenta y alberga a los más pobres y desesperados ha visto cómo sus donaciones aumentaban en 2010, mientras que el número de personas que buscan ayuda continúa estable.40

INCREMENTO DE LA DELINCUENCIA Y LA VIOLENCIA

La relación entre la delincuencia y las dificultades económicas está lejos de ser sencilla. No obstante, los informes facilitados por algunas comunidades son motivo de preocupación por que la crisis quizás esté presionando a algunos, especialmente a aquellos marginados de la economía, a desafiar a las leyes y normas, de modo que amenazan seriamente a la cohesión comunitaria. Por ejemplo, los informes acerca del aumento de la delincuencia se han vuelto más frecuentes en algunos emplazamientos.

En 2009 se percibió un aumento de los robos, cada vez más extendidos, en las zonas rurales de Camboya. "Creemos que cada vez hay más robos debido a las dificultades en la zona... pero ya no tenemos miedo , ya que vivimos en casas vacías...no tenemos nada que puedan robarnos". Una persona dijo: "No sé qué puedo hacer para ganarme la vida...quizás yo también empiece a robar".41

En Nairobi y Dhaka, había informes de que en los vecindarios se han implementado nuevas iniciativas de vigilancia comunitaria para hacer frente a la creciente delincuencia.42

La violencia, el comportamiento antisocial y el consumo de alcohol y de drogas también parecen ir en aumento en algunas de las comunidades más afectadas, y en algunos lugares van acompañadas de la desintegración de familias y normas sociales.

En Bangkok, preocupaba el aumento del consumo de alcohol y se creía que el tráfico de drogas se presentaba como una oportunidad cada vez más atractiva para obtener ingresos.43

En Camboya, Kenya y Zambia, se sugirió que la desaceleración había acarreado el crecimiento de la industria del sexo.

En Sana, las mujeres expresaron su preocupación acerca del aumento de la delincuencia, la violencia y el consumo de qat.

Un informe de Bahrein describe "un número creciente de millonarios, una clase media en disminución y una clase social empobrecida". El creciente sentimiento de injusticia, y no la pobreza absoluta, ha sido lo que ha llevado a "repetidas confrontaciones y tensiones entre las comunidades empobrecidas y las fuerzas de seguridad, sobre todo en los pueblos”.

Un ladrón que intentó robar un teléfono móvil es arrestado por la policía.
Goma (República Democrática del Congo): Un ladrón que intentó
robar un teléfono móvil es arrestado por la policía. La relación
existente entre las dificultades económicas y la delincuencia es
compleja. No obstante, los informes de varios países parecen
indicar crecientes niveles de actos delictivos. © Teun Voeten 2009

Voces de los Vulnerables:

Una chica en Nairobi describe su vida familiar en tiempos de estrés económico44

Mis padres no se preocupan de si hay o no alimentos en casa. De lo único que se preocupan es de beber, soltarse insultos y pelearse... Mi hermana y yo hemos dormido a la intemperie tantas veces que hemos perdido la cuenta. A veces mi padre llega a casa y simplemente decide que no quiere vernos... En toda una semana no hemos cocinado una sola comida y quizás esta situación perdure.

Ya que hablamos, mi padre echó a mi madre de casa ayer por la noche después de haberse peleado, como de costumbre. Incluso tengo mucho miedo de volver a casa, ya que mi padre estaba muy enfadado la ayer por la noche.

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El contenido de esta página es una traducción no oficial, elaborada con la
participación de la Facultad de Traducción de la Universidad de Salamanca.

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