«Los miembros aprueban 53 resoluciones y emiten 29 declaraciones del Presidente al tiempo que se reduce el número de sesiones»
Cuando el Consejo de Seguridad se enfrentó a un segundo año de tumultuoso cambio en el mundo árabe en 2012 —en el que se incluía un mayor derramamiento de sangre en Siria y las estables, pero difíciles, transiciones en Libia, el Yemen y otros lugares—, se hizo cargo de las nuevas crisis que estallaron en Malí y Gaza, pero también observó cómo el programa de estabilización a largo plazo llegaba a buen puerto; en particular, la buena conclusión de las Operaciones de Mantenimiento de la Paz en Timor-Leste y la transición política en Somalia.
El Consejo aprobó 53 resoluciones en 2012 —de las cuales, 40 trataban sobre África— y emitió 29 declaraciones del Presidente. Luchó, una vez más, por lograr un consenso, y sólo cuatro de los textos requirieron votación. Dos de ellos fueron vetados por China y la Federación de Rusia ya que el Consejo se encontraba dividido acerca de qué medios emplear para fomentar una transición pacífica y ordenada en Siria.
En total, el Consejo mantuvo 184 sesiones públicas en 2012, en comparación con las 213 que mantuvo en 2011. De estas 184, 85 trataban sobre África. En ellas, pronto se expresó una profunda preocupación en relación con la "combinación tóxica" de problemas humanitarios y políticos en el Sahel. Estos retos se vieron exacerbados por el flujo de armas y de migrantes que salían de Libia después de los disturbios en el país, además de por la presencia de grupos terroristas y delictivos en la vasta región. Estos elementos se unieron a la actividad rebelde del norte de Malí, que al final fue invadido por milicias, algunas de las cuales estaban relacionadas con grupos terroristas, según se informó al Consejo, cuando el país, hasta entonces estable, sufrió un golpe de estado en marzo. En sucesivas sesiones sobre esta situación a lo largo del año, el Consejo autorizó una fuerza con liderazgo africano para ayudar al ejército de Malí a estabilizar el país, tal y como propusieron las organizaciones regionales en diciembre.
En otras partes de África: Somalia puso fin a su periodo de transición política con la elección de un nuevo Presidente en septiembre. Sin embargo, el progreso que se apreció en el proceso de paz Norte-Sur del Sudán durante 2011, que culminó con el nacimiento de la República del Sudán Meridional, fue seguido en 2012 por una reanudación de las tensiones entre los dos países debido a cuestiones pendientes que desembocaron en acciones militares. También se observaron progresos en la puesta en práctica de los acuerdos más recientes sobre Darfur, pero no bastó para acabar con los enfrentamientos y los persistentes desplazamientos. En la República Democrática del Congo se observó también una renovación de las actividades insurgentes, con un enorme sufrimiento por parte de los civiles, después de una sublevación de los miembros del movimiento M23, un grupo rebelde que anteriormente formaba parte de las Fuerzas Armadas nacionales. Guinea-Bissau sufrió un golpe de estado en abril, después de que se hubiera avisado al Consejo de los esfuerzos para reformar el sector de la seguridad y llevar a cabo otros cambios.
En lo que respecta a Siria, una sucesión de iniciativas políticas no consiguió detener la escalada entre las fuerzas del Gobierno y la oposición armada; ambas parecían cada vez más atrapadas en una lucha a muerte. En abril, el Consejo acordó hacer uso del personal no armado para observar una cesación del fuego, de acuerdo con el plan de seis puntos del Enviado Especial Conjunto, el Sr.Kofi Annan. Se enviaron refuerzos como parte de la Misión de Supervisión de las Naciones Unidas en la República Árabe Siria (UNSMIS). Sin embargo, el alto el fuego nunca ocurrió y el número de víctimas civiles siguió ascendiendo a medida que los centros de población constituían nuevos objetivos. China y la Federación de Rusia mantuvieron su oposición a cualquier tipo de lenguaje que permitiera las medidas coercitivas contra el Gobierno de Siria, y ambas opusieron su veto al texto que hubiera podido prorrogar la Misión, que venció el 19 de agosto. Tal acción, así como su anterior veto en febrero, provocaron muchas diferencias tras la votación.
Información sobre la creciente matanza en Siria continúo hasta el final del año en informes mensuales sobre Oriente Medio, así como la información sobre la amenaza que representaba la crisis para la seguridad y la estabilidad del vecino Líbano. Las actualizaciones sobre la situación israelo-palestina, que también figuraban en dichas exposiciones informativas, siguieron advirtiendo de que el statu quo, congelado por el estancamiento de las negociaciones directas, era insostenible. Se demostró una vez más que esto era cierto con el lanzamiento de cohetes a la zona sur de Israel y su respuesta, que estallaron en un bombardeo aéreo total en noviembre, con Israel de nuevo preparado para un ataque terrestre hasta que se acordara la cesación del fuego. El Secretario General, dirigiéndose al Consejo por videoconferencia desde la región, recomendó a las partes que se alejaran del conflicto, pero también advirtió, como hicieron otros oficiales, que la paz en la región no podía asentarse sin una solución integral.
Además de la UNSMIS, el Consejo de Seguridad no creó nuevas misiones en 2012. En diciembre la Misión Integrada de las Naciones Unidas en Timor-Leste (UNMIT) finalizó su mandato después de asegurar el progreso en la seguridad y la exitosa celebración de elecciones nacionales. El Consejo redujo los componentes militares y de policía de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (MINUSTAH) con el objetivo de alcanzar niveles anteriores al terremoto, en medio de deliberaciones acerca de los requisitos para su futura retirada. Las misiones en Liberia, Sierra Leona y Côte d'Ivoire también se reconsideraron, teniendo en cuenta los avances que dichos países habían logrado en la consolidación de la estabilidad.
La protección de los niños y otros no combatientes, el empoderamiento de las mujeres en situaciones de conflicto, y otros asuntos relacionados continuaron siendo un elemento central en las sesiones públicas durante 2012. También se trataron las preocupaciones en materia de proliferación en el Irán y la República Popular Democrática de Corea, a menudo como respuesta a los informes acerca de las actividades nucleares y los ensayos con misiles. Mediante la emisión de 12 comunicados de prensa, el Consejo condenó los ataques terroristas de envergadura en distintos países alrededor del mundo, al mismo tiempo que continuó vigilando el cumplimiento de las resoluciones relativas a la lucha contra el terrorismo a través de sus órganos subsidiarios, que informaron a los miembros del Consejo en varias ocasiones.
Con relación a los Tribunales Internacionales para Rwanda y la ex Yugoslavia, en julio se produjo la entrada en funcionamiento de la subdivisión de Arusha del "Mecanismo Residual", a la que el Consejo autorizó para que llevase a cabo las tareas pendientes y la documentación del legado. Los Tribunales siguieron informando de los progresos de su labor, a pesar de los problemas de dotación de personal, las recientes detenciones y las apelaciones. Sin embargo, las perspectivas de reconciliación en partes de la ex Yugoslavia, como Kosovo y Bosnia y Herzegovina, siguieron siendo difíciles, como escuchó el Consejo en exposiciones informativas.
Continuando con su costumbre de emprender misiones para recopilar información de primera mano acerca de situaciones clave, los miembros del Consejo visitaron Haití desde el 13 hasta el 16 de febrero; África Occidental (Liberia, Sierra Leona y Côte d'Ivoire) desde el 18 hasta el 24 de mayo; y Timor-Leste desde el 3 hasta el 6 de noviembre.
La Asamblea General eligió a la Argentina, Australia, Luxemburgo, República de Corea y Rwanda como miembros no permanentes del Consejo de Seguridad por un período de dos años a partir del 1 de enero de 2013. Sustituyeron a Alemania, Colombia, la India, Portugal y Sudáfrica, que finalizaron sus mandatos el 31 de diciembre de 2012. Azerbaiyán, Guatemala, Marruecos, el Pakistán y el Togo completarán sus mandatos al final de 2013. China, los Estados Unidos de América, la Federación de Rusia, Francia y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte son miembros permanentes.
Este documento informativo ha sido publicado por la Dependencia de Información al Público del Departamento de Información Pública, Naciones Unidas. Este no es un documento oficial. Únicamente tiene fines informativos. La información fue obtenida del comunicado de prensa SC/10881 
, de fecha 14 de enero de 2013.
El contenido de esta página es una traducción no oficial, elaborada con la participación de la Facultad de Traducción de la Universidad de Salamanca. (junio 2013)