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Consejo de Seguridad 2004: Recapitulación

El Iraq

El Consejo de Seguridad comenzó su examen de la situación en el Iraq el 24 de febrero a través de las exposiciones informativas de los representantes del Reino Unido y de los Estados Unidos de América en nombre de la Autoridad Provisional de la Coalición. El representante de los Estados Unidos observó que, pese a que los avances no eran siempre tan rápidos como hubieran deseado, ese era un momento esperanzador para el Iraq, puesto que se preparaba para la transferencia de la soberanía a un Gobierno del Iraq el 30 de junio. Destacó que los tres meses transcurridos desde la última vez que informaron al Consejo de Seguridad daban prueba de los importantes avances logrados. Estos logros incluían que la ley administrativa de transición estaba casi concluida y la captura de Saddam Hussein, que sería sometido al debido proceso por los crímenes contra el pueblo iraquí y de lesa humanidad.

El Subsecretario General de Operaciones de Mantenimiento de la Paz, Hedi Annab, anunció en una exposición informativa el 24 de marzo que se había llegado a uno de los últimos hitos importantes: se había establecido una fecha para celebrar unas elecciones libres y justas. Para dotar al nuevo Gobierno de los instrumentos fundamentales para una gestión pública eficaz, había que seguir avanzando en la reforma del sector de la seguridad. Advirtió que, sin una desmilitarización considerable, la libertad política auténtica que se requiere para unas elecciones dignas de crédito resultaba simplemente imposible.

Contra el telón de fondo de los crecientes disturbios en Bagdad y con la serie de brutales ataques violentos en las alejadas ciudades y pueblos iraquíes desde principios de abril, el representante de los Estados Unidos, al dirigirse a la Coalición el 16 de abril, dijo que la fuerza multinacional seguía comprometida con el objetivo de crear un Iraq democrático, pacífico y estable y que mantendría el curso ante la amenaza continua que ejercían las fuerzas insurgentes, elementos leales al régimen anterior y los terroristas que se habían infiltrado en el país. El Asesor Especial del Secretario General, Lakhdar Brahimi, el 27 de abril informó al Consejo de que la mayoría de los iraquíes eran partidarios de que se estableciera un nuevo Gobierno provisional y sugirió convocar una conferencia nacional con el fin de entablar un auténtico diálogo nacional sobre los retos que encaraba el país. Entre ellos se encontraba la situación de seguridad que seguía siendo en extremo preocupante. Persistía un ambiente de gran tensión y ansiedad debido al sitio de Fallujah, el levantamiento del ejército de Mahdi en el Sur y el aumento general de la violencia. El 17 de marzo, el Consejo de Gobierno del Iraq y la Autoridad Provisional de la Coalición habían solicitado que las Naciones Unidas prestaran asistencia en la conformación de un Gobierno provisional al que se le traspasaría la soberanía en junio, así como con respecto a los preparativos para las elecciones directas que habían de celebrarse antes de fines de enero de 2005.

Tras la exposición informativa del Sr. Brahimi, el Consejo emitió una declaración del presidente en la que expresaba su firme apoyo a sus esfuerzos y acogía con beneplácito las ideas provisionales que había presentado como base para la formación de un Gobierno provisional.

En su última exposición periódica al Consejo, el 19 de mayo, antes de la cesión de la soberanía al Iraq, el representante de los Estados Unidos, en nombre de la Autoridad Provisional de la Coalición, afirmó que el 30 de junio se daría un paso vital hacia el logro del objetivo de un Iraq independiente y estable. Subrayó que la lucha contra el terror y en favor de la estabilidad y la seguridad del Iraq sería una lucha compartida e instó a la comunidad internacional a que participase en la importante tarea de ampliar las fuerzas de seguridad iraquíes. Esto facilitaría el retorno del personal de las Naciones Unidas al Iraq y permitiría a las Naciones Unidas continuar su papel vital de ayudar a los iraquíes a prepararse para las elecciones. En cuanto a los abusos contra los detenidos iraquíes en Abu Ghraib afirmó que su país compartía el disgusto y la consternación del resto del mundo.

En busca de «una resolución nueva e inequívoca» que subrayara la transferencia de la plena soberanía al pueblo del Iraq y a sus representantes, el recién nombrado Ministro de Relaciones Exteriores del Iraq, Hoshyar Zebari, en una exposición informativa histórica celebrada el 3 de junio instó al Consejo a respaldar al Gobierno provisional, expresar su apoyo al actual proceso político y reconocer la necesidad de que el Iraq cuente con la presencia constante de una fuerza multinacional en asociación con las autoridades iraquíes.

El 7 de junio el Sr. Brahimi le dijo al Consejo que tras un proceso largo, complicado y delicado, que tuvo lugar en condiciones que distaban de ser óptimas, el Iraq contaba entonces con dos instituciones fundamentales para la siguiente etapa: un Gobierno provisional y una Comisión Electoral independiente. Afirmó que el Gobierno provisional generalmente había encontrado aceptación. Había un deseo ferviente de los iraquíes de que un Gobierno elegido asumiera el poder de manos de la Autoridad Provisional de la Coalición, pero que la evaluación técnica fue que, sencillamente, no estaban dadas las condiciones para que eso sucediera antes del 30 de junio. Se había descartado la posibilidad de retrasar el fin de la ocupación.

Al día siguiente, el Consejo se reunió para aprobar la resolución integral en el Iraq (1546), que respaldaba la formación de un Gobierno provisional y la celebración de elecciones democráticas en enero de 2005. Acogió con beneplácito la cesación de la ocupación para el 30 de junio y determinó cuál era la posición de la fuerza multinacional y su relación con el Gobierno del Iraq, además del papel que desempeñarían las Naciones Unidas en la transición política. Entre las muchas disposiciones relativas a la fuerza multinacional, el Consejo decidió que la fuerza tendría la capacidad para adoptar todas las medidas necesarias para contribuir al mantenimiento de la seguridad y la estabilidad en el Iraq de acuerdo con dos cartas con fecha de 5 de junio, dirigidas al Presidente del Consejo por el Primer Ministro del Gobierno provisional, Ayad Allawi, así como por el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Collin L.Powell.

El 12 de agosto, el Consejo prorrogó el mandato de la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas para el Iraq (UNAMI) por 12 meses, mediante la aprobación por unanimidad de la resolución 1557 (2004) Documento PDF. Asimismo, expresó su intención de revisar el mandato en el plazo de un año o antes si fuera requerido por el Gobierno del Iraq. (Establecida inicialmente en virtud de la resolución 1500 (2003) Documento PDF durante un período de un año para prestar apoyo al Secretario General en el cumplimiento del mandato que le había sido encomendado en la resolución 1483 (2003) Documento PDF y con el fin de consolidar las actividades de las Naciones Unidas en el Iraq, la UNAMI inició sus operaciones el 1º de septiembre de 2003 con más de 300 efectivos civiles internacionales y nacionales).

El nuevo Representante Especial del Secretario General para el Iraq, Ashraf Jehangir Qazi, en su primera exposición de información oficial ante el Consejo, el 14 de septiembre, dijo que con el despliegue de la UNAMI, la «Bandera Azul» ondeaba nuevamente en el Iraq, pero que era inevitable dejar una leve impronta en la actual situación de seguridad. No obstante, la UNAMI estaba comprometida a apoyar activamente a la Comisión Electoral del Iraq. Sin embargo, la magnitud y la amplitud de la actividad de la UNAMI a ese respecto estaría determinada necesariamente por las circunstancias imperantes, incluido el entorno de seguridad, afirmó. A fin de poder ampliar la dotación de personal y las actividades llevadas a cabo en el Iraq, el Consejo, el 1º de octubre, acogió con beneplácito las disposiciones propuestas por el Secretario General relativas a una estructura integrada de seguridad de las Naciones Unidas para su misión (UNAMI) e instó a los Estados Miembros a responder positivamente a través de contribuciones.

En virtud de la aprobación de una carta del Secretario General el 30 de noviembre, el Consejo respaldó la creación de un fondo fiduciario para prestar apoyo a una fuerza de protección de las Naciones Unidas en el Iraq. (La resolución 1546 (2004) Documento PDF del Consejo de Seguridad había expresado la intención del organismo de «crear una entidad separada bajo el mando unificado» de la fuerza internacional con la misión específica de encargarse de la seguridad de la presencia de las Naciones Unidas en el Iraq).

El 13 de diciembre, el Sr. Qazi, el Representante Especial, informó al Consejo en una exposición informativa que, contra le telón de fondo de la difícil situación general de seguridad y una opinión pública dividida, las próximas elecciones serían una prueba del nuevo orden político y del proceso de transición que estaba teniendo lugar. Era esencial para las elecciones ofrecer una plataforma para que pudieran expresarse todas las opiniones iraquíes. Aunque la violencia, gran parte de ella de una brutalidad extrema e indiscriminada por naturaleza, había trastornado una gran parte del país, estaba convencido de que para la mayoría del pueblo iraquí la violencia era detestable y exigían una salida de esa situación a través del establecimiento de un Gobierno que gozara del consentimiento manifiesto de la mayoría de la población.

El representante del Iraq insistió en que en esos momentos había pocas cuestiones que revistieran tanta importancia para el Iraq como las próximas elecciones. El peligro para las elecciones y su credibilidad provendría no tanto de un boicot sino de la campaña de violencia e intimidación. Aunque acogió con beneplácito la reciente decisión del Secretario General de desplegar más personal de asistencia electoral en el Iraq, afirmó que esa cantidad mayor era aún insuficiente. Se preguntaba cómo podrían las Naciones Unidas desempeñar el papel rector que se les encomendaba en la resolución 1546 si en gran medida se mantenía aislada del pueblo. Destacó que la frase «en medida en que las circunstancias lo permitan» no debería utilizarse para justificar una presencia insuficiente sobre el terreno.

Programa «petróleo por alimentos».

El 21 de abril, el Consejo, expresando el deseo de que se realizara una investigación plena e imparcial de los intentos del ex Gobierno del Iraq por eludir las disposiciones de la resolución 661 (1990) Documento PDF y posteriores resoluciones en la materia, incluso mediante soborno, cohecho, recargos en las ventas de petróleo y pagos ilícitos relacionados con adquisiciones de bienes humanitarios, acogió con satisfacción la decisión del Secretario General de organizar una investigación independiente y de alto nivel que examinara dicha cuestión. Al adoptar por unanimidad la resolución 1538 (2004) Documento PDF, el Consejo hizo un llamamiento a la Autoridad Provisional de la Coalición, al Iraq y a todos los demás Estados Miembros, incluidas sus autoridades reguladoras, para que colaboraran plenamente.

Los miembros de la comisión investigadora fueron: Paul Volcker, ex presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos; Mark Pieth, experto suizo en lavado de dinero de la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo (OCDE); y Richard Goldstone, ex fiscal sudafricano de los Tribunales Internacionales para la Antigua Yugoslavia y Rwanda.

Fundado en 1996, el programa «petróleo por alimentos» permitía al Iraq usar parte de sus ingresos de la venta de crudo para adquirir ayuda humanitaria. La campaña era supervisada por el comité «661» del Consejo de Seguridad, que incluía a representantes de los 15 países miembros del Consejo. Cuando la iniciativa terminó, en noviembre de 2003, el programa había otorgado ayuda humanitaria con valor de 39.000 millones de dólares a 22 millones de personas, muchos de los cuales dependían enormemente de la ayuda externa para sobrevivir debido a que la actividad económica había sufrido un grave deterioro por las sanciones impuestas al Iraq tras la invasión de Kuwait en 1990.

(Se está llevando a cabo un número de investigaciones paralelas, incluido en el Congreso de los Estados Unidos)


El contenido de esta página es una traducción no oficial, elaborada con la participación de la Facultad de Traducción de la Universidad de Salamanca.