ONU Bienvenidos a las Naciones Unidas. Son su mundo.
Page not found | United Nations
The requested page "/content/es/_vidout/video1627.shtml" could not be found.

Los sidis: un pueblo olvidado

Narración

En el estado de Guyarat, al oeste de la India, viven más de 20.000 sidis, un grupo étnico con raíces africanas.

Aunque viven lejos de la tierra de sus antepasados, los sidis han mantenido su cultura.

Ahora es una fuente de ingresos para ellos.

«Actuamos en hoteles por unas 1.500 rupias o 25 dólares estadounidenses. // Vamos al hotel en temporada alta a bailar para los turistas».

Imran es sidi, descendiente de los bantúes del sudeste africano.

Cree que sus antepasados procedían de Uganda. Ahora vive con su madre y su abuela en una pequeña aldea llamada Jambur. Está rodeada por el bosque de Gir, que alberga los últimos 500 leones asiáticos que quedan en el mundo.

Hace siglos, algunos africanos procedentes de Etiopía, Eritrea y Somalia partieron hacia el subcontinente indio como comerciantes, mientras que otros fueron llevados como esclavos. Los sidis afirman que eran esclavos de élite, únicamente al servicio de la clase dominante.

Su lealtad y sus conocimientos militares llamaron la atención de los nababs o gobernantes musulmanes de la India, así como del imperio musulmán mogol a principios del s. XVI.

Las Naciones Unidas han inaugurado recientemente una exposición para explicar la llegada de los sidis al poder gracias a su estatus militar. Crearon espléndidos estados sidis e incluso actuaron como reyes, algo que apenas se sabe en el mundo.

«Mira lo que consiguieron, tanto para ellos como para la sociedad india. Llegaron a ser nobles, líderes, soldados, almirantes».

«Hoy en día, los sidis son los descendientes de aquellos que vivieron en el siglo XIX y también de algunos africanos que llegaron más tarde».

En el siglo XIX, algunos africanos de regiones situadas más al sur fueron llevados a la India. Entre ellos estaban los antepasados de Imran.

«El nabab de Junagarh nos trajo aquí para que pusiéramos las vías del tren y fuéramos sus guardaespaldas, porque los africanos éramos más fuertes».

Con el paso del tiempo, algunos lograron escapar de la esclavitud y se asentaron en áreas forestales.

Hoy en día, la vida de miles de sidis como Imran dista mucho de ser ostentosa. // La mayoría vive en una situación de pobreza y marginación social.

Por suerte, Imran puede ganarse la vida con el baile, y cuando no se dedica a ello, trabaja de guía en el bosque de Gir.

«Los que encontramos trabajo en el bosque o en el ejército ganamos un dinero extra con el que nos las arreglamos para vivir».

Además de fuerza, los sidis explican que los nababs también creían que tenían una relación especial con los leones asiáticos y con la propia naturaleza.

«Conocemos los hábitos y el comportamiento de los leones, cuándo están enfadados, cuándo atacan... // Si vamos a algún sitio y hay leones, nunca los molestamos ni los alteramos. Es casi como si fueran de la familia».

A Imran le preocupa que se extingan los últimos leones asiáticos que quedan si no se toman las medidas adecuadas para evitarlo.

«Toda la aldea sobrevive gracias a los leones, así que si ellos desaparecen, la aldea también. Sería el fin».

Cuando se les preguntó por su procedencia, los sidis dijeron que se consideraban indios.

«Mi país es la India, y por ello quiero vivir y morir aquí».

Este reportaje ha sido producido por Mary Ferreira para las Naciones Unidas.

22 de abril de 2016

En el estado de Guyarat, al oeste de la India, viven más de 20.000 sidis, un grupo étnico con raíces africanas que, hoy en día, muchos de ellos viven en la pobreza y la marginación social.
Un joven sidi está luchando por proteger su extraordinaria cultura, así como sus estrechos vínculos con los leones asiáticos que quedan en el bosque de Gir.

¡Síguenos!

Facebook Youtube Twitter RSS